Regos renuncia a las alegaciones al presupuesto que formuló en nombre de su partido, lastrado por dimisiones y abandonos
07 sep 2017 . Actualizado a las 05:00 h.La corporación de Ordes escenificó ayer la fractura de Unión por Ordes (UxO), el partido que gobernó el municipio entre los años 2007 y 2015, siempre con Manuel Regos como alcalde. El exregidor, que hace dos años perdió por siete votos el concejal que probablemente le habría permitido continuar en el cargo con un gobierno en minoría, ha visto como en apenas dos semanas tres miembros de su equipo abandonaron Unión por Ordes por discrepancias internas.
Este vacío fue evidente en las formas y el fondo del debate plenario que debía debatir las alegaciones de UxO al presupuesto municipal, que el PP vinculó en junio pasado a una cuestión de confianza por no contar con los votos suficientes para ratificarlo por mayoría.
Roberto González, hasta hace unos días número cuatro de UxO, visibilizó su pase al grupo de no adscritos convirtiéndose en compañero de mesa del BNG y de los dos exediles que meses antes abandonaron el PP.
En cuanto al contenido de la sesión, el orden del día estableció en primer lugar la toma de conocimiento formal de las dimisiones de Silvia Marín, la número dos de UxO y hasta el pasado 11 de agosto portavoz municipal, y de Lucía Iglesias. Ninguna acudió al pleno para despedirse, pero ambas reconocieron el pasado 31 de agosto en un comunicado conjunto que abandonaban esta siglas «por non estar de acordo coa liña política que está a seguir Unión por Ordes».
El principal asunto de debate fue, precisamente, la alegación presentada por UxO al presupuesto ordense, una reclamación formulada, según el alcalde, el popular José Luis Martínez Sanjurjo, para paralizar la gestión diaria y la toma de decisiones para nuevos proyectos.
Este asunto ya fue abordado en una comisión informativa a la que Regos no acudió. Y en el pleno extraordinario de ayer, el exalcalde, que solamente estaba acompañado de José Luis Gómez Candal, retiró su propuesta, que sustituyó por un informe jurídico con el que Unión por Ordes quiso rebatir los dictámenes de los técnicos municipales, ya que estos consideraron contrario a derecho las alegaciones al presupuesto. Tras este cambio de rumbo, Regos escuchó duras críticas del regidor, que lo acusó nuevamente de buscar la parálisis en la gestión. También el BNG calificó lo ocurrido como una innecesaria pérdida de tiempo.
Aprobada la renuncia, que el presupuesto entre en vigor depende del simple trámite de la publicación del preceptivo anuncio en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP).