Santiago tiene 47 kilómetros de carretera de gran riesgo con siete muertos en tres años

Xurxo Melchor
xurxo melchor SANTIAGO / LA VOZ

ORDES

Álvaro Ballesteros

Entre el 2012 y el 2014 estos tramos acumularon 26 accidentes con otros 22 heridos graves

03 abr 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Cuatro de los cien tramos de carretera con mayor riesgo de toda España están en el área de Santiago. En estos 47,4 kilómetros de vías nacionales se produjeron en tres años 26 accidentes graves con siete muertos y otros 22 heridos, según el informe del 2015 del Real Automóvil Club de España (RACE), que analiza el período entre el 2012 y el 2014.

El peor de estos cuatro tramos de riesgo está en la N-547, entre Boente (Arzúa) y el casco urbano de Melide. El RACE sitúa este trayecto de 7,5 kilómetros como el séptimo de mayor peligrosidad de todo el Estado. Entre el 2012 y el 2014 hubo cuatro accidentes graves con otros tantos heridos de consideración. Son menos que en otros períodos y no hubo fallecidos, lo que pone de manifiesto que las medidas tomadas, como la prohibición de adelantar en zonas en las que antes se permitía, están surtiendo el efecto deseado. Sin embargo, el índice de riesgo ha seguido incrementándose en los últimos años. En el 2013 tenía nivel naranja y en los siguientes pasó a negro, el máximo.

En el puesto 18 y también en nivel negro de riesgo -mayor que en el 2013 y el 2014, ambos con nivel rojo- están los 13,9 kilómetros de la N-634 que separan Ponte Carreira (Frades) de Sesmonde (Vilasantar). Aquí hubo ocho accidentes importantes con dos muertos y siete heridos graves.

En los 10,1 kilómetros de la N-550 (A Coruña-Tui) entre Ordes y Mesón do Vento hubo ocho accidentes graves, con dos muertos y seis heridos. Este es el único de los cuatro tramos que ha visto reducida su peligrosidad, aunque sigue ocupando el puesto 37 en el ránking. En el 2013 tenía nivel negro y ahora solo rojo.

En el puesto 75 de los tramos de mayor riesgo de España está el que separa la rotonda del enlace de la autovía A-54 en Lavacolla con el final de la zona urbana de Ferreiros, en O Pino. Estos 15,9 kilómetros también están situados en la N-547, la carretera que une Santiago con Lugo. En esos tres años se registraron seis accidentes graves en los que hubo tres muertos y otros cinco heridos de gran consideración. En este punto el nivel de peligrosidad, que bajó de rojo a naranja en el 2014 con respecto al año anterior, volvió a incrementarse en el 2015, escalando nuevamente al nivel rojo.

Firme pésimo y travesías urbanas

Toda la N-550 en su recorrido por el área de Santiago es de gran peligrosidad por su alto nivel de tráfico y el pésimo estado del firme. Estos son los dos problemas de este tramo, por el que pasan una media de 9.867 vehículos diarios, muchos de ellos pesados. El recorrido arranca en el kilómetro 36,9 y atraviesa el casco urbano de Ordes, Leira y Mesón do Vento, hasta el kilómetro 26,8. foto bruno díaz

Camiones y exceso de velocidad

Entre los puntos kilométricos 689,6 (Ponte Carreira) y 675,7 (Sesmonde) de la N-634 transitan una media de 5.731 vehículos al día. Esta vía trae a Santiago buena parte del tráfico de mercancías del Cantábrico, por lo que la alta presencia de camiones pesados es un factor de riesgo. También el exceso de velocidad que propicia un tramo poco sinuoso y con grandes rectas. foto a. b.