Ni el frío hizo mella en su estado de ánimo, porque una vez rescatado, no tuvo reparo alguno en contarles a las agentes su extraordinaria aventura.
En dirección contraria
El protagonista es un vecino del casco urbano de Ordes de algo más de 60 años que reconoció que había pasado la noche en un club de alterne que hay en las inmediaciones, en la salida hacia A Coruña. Sobre las cuatro de la madrugada abandonó el local, pero al parecer no en muy buenas condiciones, por lo que tuvo problemas para encontrar el camino de vuelta a casa. De hecho, se fue en la dirección contraria, hacia A Coruña por la N-550, y en vista de que no llegaba al casco urbano de Ordes, tras recorrer unos dos kilómetros bajo la lluvia se cansó y, empapado y exhausto, buscó refugio en una casa cercana, con la intención de resguardase a la espera de que amainara el temporal.