La Oficina Técnica del Concello de Negreira también informó en octubre de 2018 de los desperfectos en la presa, en la que hay un desplazamiento de las piedras que conforman su estructura en la parte central debido a la fuerza del agua, lo que, a su juicio, «puede minar este punto deteriorado de la presa y provocar su rotura», ya que la fuerza del agua se concentra en ese lugar.
Tres años esperando el BIC
La paciencia de los ayuntamientos de Ames y Negreira empieza a agotarse. Tres años han transcurrido ya desde la solicitud oficial a la Dirección Xeral de Patrimonio, de la Xunta, con los acuerdos plenarios y un exhaustivo informe técnico y de valoración histórica de todos los elementos, que se asemeja más a un Plan Especial, para que el conjunto patrimonial de A Ponte Maceira sea catalogado como bien de interés cultural (BIC), y que cuente con el nivel de protección y cuidado que le confiere tal declaración. Desde entonces, un requerimiento de documentación y a esperar, tras dejar zanjado que la catalogación lo será para el viejo viaducto y sus elementos patrimoniales como sus molinos, dejando fuera de su declaración al conjunto de viviendas y calles de ambas orillas del río Tambre. La cuestión es que el expediente de tramitación sigue «eternizándose» en los despachos de Patrimonio, mientras el deterioro del conjunto sigue avanzando sin piedad.