La máxima prioridad del nuevo presidente es confeccionar un equipo para salir en la Primera Galicia
11 jul 2019 . Actualizado a las 05:00 h.La Sociedad Deportiva Negreira no desaparecerá después de 55 años de historia. Un club con tanto recorrido en el fútbol gallego seguirá vivo. Cerca de una veintena de socios, encabezados por Álvaro Lira, técnico municipal de Cultura, se decidieron a dar el paso en la asamblea celebrada el martes. De este modo, consiguieron salvar de su desaparición a una entidad emblemática, que hace catorce años logró un histórico ascenso a la Segunda División B, para el que también fue necesario un esfuerzo colectivo como ahora.
La prioridad del nuevo equipo directivo es confeccionar un plantel para salir en la Primera Galicia, después del doloroso descenso del pasado curso. Y el tiempo apremia, porque algunos jugadores ya se han comprometido con equipos de la Preferente Galicia, como son los casos de Juan Diego (firmó con el Noia) y Miguel Gómez (se comprometió con el Dubra). Pero aún así, el nuevo presidente asume que es el momento de demostrar quiénes quieren estar «no barco» y quienes no. «Teremos que perder un pouco todos e poñer da nosa parte moito para sacar adiante este proxecto. Sabemos que vai ser complicado competir na Primeira Galicia porque os equipos están ben armados. Pero a nosa idea é facer un equipo que pelexe, que traballe e que intente salvar a categoría como primeiro obxectivo. Despois, tamén temos que ir pensando en mellorar a nosa situación económica», señaló Álvaro Lira.
Mejorar relaciones
Los nuevos dirigentes se marcan también como uno de sus principales retos mejorar las relaciones con el resto de clubes: «Temos que mirar para adiante, non para atrás, e non pensar nos problemas persoais que se tiveron no pasado. Hai que tender unha man a todos os clubs deportivos e colectivos do Concello, pensando en positivo por un club que nos dignificou ao longo de moitos anos por toda Galicia», apuntó Álvaro Lira, quien habló de una situación «límite» por la que atravesó el Negreira en el último mes antes de que el club pudiese entregarse a la Federación Galega de Fútbol. El nuevo mandatario afirmó que «foron tres asembleas moi tensas», por lo que ahora confía en que con la colaboración de todos «poidamos sacar ao Negreira desta difícil situación». Para alcanzar esta meta entiende que hace falta reclamar la atención de la masa social de la entidad rojilla: «Este é un grupo que está aberto a que haxa máis incorporacións, pero tamén a que haxa a máxima colaboración e implicación de socios e simpatizantes, que son moitos e que non queren que o Negreira desapareza». Explicó finalmente que es el momento de arrimar el hombro y aportar cada uno su grano de arena para llevar a buen puerto este proyecto.