El Concello de Negreira pide la modificación o retirada de una placa franquista de una iglesia

emilio forján NEGREIRA / LA VOZ

NEGREIRA

FORXAN

Está en el exterior del templo parroquial de San Xulián

09 ago 2018 . Actualizado a las 05:10 h.

El Concello de Negreira solicitó a la Archidiócesis de Santiago la modificación o la retirada de la placa conmemorativa situada en una de las paredes exteriores de la iglesia parroquial de San Xulián, referida «exclusivamente» a «combatientes del bando nacional en la Guerra Civil». Considera que vulnera la Ley de Memoria Histórica, que en su artículo 15 sobre símbolos y monumentos públicos dispone en su primer apartado: «Las administraciones públicas, en el ejercicio de sus competencias, tomarán las medidas oportunas para la retirada de escudos, insignias, placas y otros objetos y menciones conmemorativas de exaltación, personal o colectiva, de la sublevación militar, de la Guerra Civil y de la represión de la dictadura». Entre las medidas, podrá incluirse la retirada de subvenciones o ayudas públicas.

El Ayuntamiento negreirés recuerda que en el apartado segundo de dicho artículo 15, la Ley de la Memoria Histórica recoge que lo previsto en el primer apartado, no será de aplicación cuando sean menciones de estricto recuerdo privado «sin exaltación de los enfrentados, o cuando concurran razones artísticas, arquitectónicas o artístico-religiosas protegidas por la ley», lo que no concurre en la placa de mármol blanco instalada en el exterior del templo parroquial de San Xulián. De ahí, que insten a su modificación o retirada.

El alcalde negreirés, Jorge Tuñas Caamaño (PSOE), propone en su escrito la modificación de la citada placa «sen facer mención a ningún dos bancos enfrontados durante a Guerra Civil», o en su defecto «a retire, ao considerarse que supón a exaltación colectiva da sublevación militar». Añade que desde la alcaldía se ponen a «plena» disposición de la Archidiócesis de Santiago «para a realización de tódalas medidas oportunas».

El escrito tiene fecha del pasado 30 de julio, justo el lunes siguiente a que Jorge Tuñas asistiese invitado en Val do Dubra al acto solemne en el que se entregaron a sus familias los restos de cuatro represaliados por el franquismo en 1949 y que había huido de Zas, en Negreira.