Tres nuevos albergues refuerzan la oferta de Negreira con el bum del Camino de Fisterra
NEGREIRA
Uno de los proyectos ocupa dos casas a restaurar en el entorno histórico de O Cotón, con una inversión de medio millón de euros
05 oct 2016 . Actualizado a las 05:00 h.A comienzos del año 2010 abrió en Negreira el primer albergue privado que vino a cubrir la entonces creciente demanda de alojamientos en la ruta hacia Fisterra y Muxía. Fue el albergue turístico San José, en la villa, dotado de cincuenta literas, sumándose a la oferta de veinte plazas del alojamiento municipal de Patrocinio. Ese mismo año abrió el albergue rural de Logrosa, el segundo de iniciativa privada, pero desde entonces la lista no ha parado de crecer con otros tres más en el centro urbano: Lúa, El Carmen y Alecrín, además de O Rueiro, en Vilaserío, y el Anjana, sito en A Chancela, el último que abrió sus puertas y el séptimo en cinco años.
Hoy en día hay tres nuevos proyectos en marcha debido al constante auge de afluencia de peregrinos del Camino de Fisterra. Dos de ellos están muy avanzados para su próxima apertura, el de A Pena -que ya funciona como bar-, y un segundo albergue en Vilaserío, en la parroquia de Bugallido, mediante la restauración de una antigua vivienda de piedra. Ambos establecimientos no superan cada uno la treintena de plazas.
El tercero está aún en fase de tramitación del proyecto. Se trata de una ambiciosa iniciativa de albergue y pensión, que ocupará dos inmuebles en estado ruinoso del entorno de la plaza do Cotón, en las inmediaciones del pazo, en pleno Camino de Fisterra.
El proyecto consiste en la rehabilitación y ampliación de dos viviendas con un presupuesto de ejecución que supera los 400.000 euros de inversión. En el caso de una de las viviendas se planea una demolición parcial que afecta a su fachada posterior, hacia el río Barcala, además de su ampliación en planta y sección. En el caso de la segunda vivienda, se rehabilitará sin variar su volumen. Ambas se encuentran en la zona de afectación del pazo do Cotón, por lo que están pendientes del dictamen de la Dirección Xeral de Patrimonio, así como del de Augas de Galicia, dado que los terrenos se encuentran en zona de dominio hidráulico, a unos 45 metros del cauce fluvial del Barcala.