«Trabajamos con expectativas a largo plazo»

MELIDE

Diego ?izquierda? se incorporó como camarero al gastrobar de Ceballos y Diéguez
Diego ?izquierda? se incorporó como camarero al gastrobar de Ceballos y Diéguez SANDRA ALONSO

Alexandre Diéguez y Nailen Ceballos abrieron en Melide un gastrobar, tras años empleados en el sector

20 jul 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Materia prima de calidad, bien tratada en la cocina, donde Alexandre Diéguez desempeña con esmero y respeto el oficio para el que se formó en el santiagués Lamas de Abade. Tras su paso por ese reputado centro de formación de profesionales de la hostelería —en el que, además de en cocina, se tituló en restauración—, y varios años adquiriendo experiencia en el sector, este joven de 28 años abrió recientemente su primer restaurante propio en Melide, la cabecera de comarca de su municipio natal, Santiso. «Desfruta» es el nombre del gastrobar con el que el cocinero y su pareja, Nailen Ceballos, levantaron la persiana, y renovaron, el local que en su día fue mesón en la céntrica avenida de La Habana. Tras ocho años trabajando con Kike Piñeiro y Eloy Cancela en A Horta d’Obradoiro, y dos, al frente de la cocina —en alquiler— de un albergue, Alexandre dio el salto como emprendedor. «Quería hacer algo diferente, y vi que en Melide no había locales que trabajasen mucho la propuesta que quiero ofrecer, sobre todo los fines de semana», cuenta.

Fue así como él y su compañera, con un currículo vinculado al sector de la restauración en el que figura su experiencia como sumiller en el doble Estrella Michelín de Pepe Vieira, acabaron abriendo su propio local, con comedor independiente para más de una treintena de comensales. Entre semana, trabajan el menú, y, desde el viernes por la noche, una «carta reducida», a elegir entre hasta ocho entrantes —hay desde jamón ibérico y cecina de angus hasta un par de mariscos frescos, y diferentes tostas—, tres carnes, dos pescados —que, como los mariscos, pueden variar, en función de lo que haya en lonja— y varios postres caseros. «Me gusta trabajar con un producto bueno», defiende el autor de una cocina «casera, rica y sencilla». El gastrobar abrió a mediados de junio. La acogida fue «de maravilla», afirma el cocinero. Ahora, sostiene, «lo que queremos es ir poco a poco, trabajar el verano, pero con expectativas a largo plazo».