La Asociación de Troiteiros denuncia la afección en truchas y bogas del Furelos por residuales del polígono de A Madanela
14 jul 2019 . Actualizado a las 10:15 h.Las aguas del río Furelos discurren una vez más turbias desde la desembocadura en el principal cauce fluvial de Melide del arroyo Rego de Reboredo, también conocido como de Vimianzo. El regato al que desaguan las residuales del polígono industrial de A Madanela se tiñó ayer de blanco en lo que fue un nuevo vertido procedente del área empresarial del municipio melidense. La Asociación de Troiteiros Río Furelos alertó de los hechos, que causaron la mortandad de truchas y de bogas, según confirmó a media tarde el presidente del colectivo de pescadores, Xavier Pazo, que ya presentó la correspondiente denuncia ante el Servizo de Conservación da Natureza y ante Augas de Galicia.
Desde ese departamento indicaron que investigan el origen del vertido, del que tomaron muestras que «están a ser analizadas coa fin de adoptar as correspondentes medidas administrativas». Se encargaron de ello técnicos desplazados al lugar del Plan de Control de Vertidos de la Xunta, que en la inspección que realizaron comprobaron que «a afección ás augas provocada por ese vertido acada o leito do río Furelos». Y desde el Concello de Melide, que también tomó muestras para su análisis por un laboratorio independiente, el regidor José Manuel Pérez, su primer teniente de alcalde, José Antonio Prado, y el edil de Medio Rural, Xosé Igrexas, también se desplazaron al lugar para conocer de primera mano la magnitud de «un problema endémico», ante el que «é unha prioridade deste goberno poñer solucións» para las que «estamos recollendo toda a información que consta no Concello e nas autoridades competentes».