Una manada de perros de caza sueltos crea alarma en Melide

Natalia Rodríguez Noguerol
N. noguerol MELIDE / LA VOZ

MELIDE

CEDIDA

Los canes deambularon por la zona del cementerio de Furelos

03 nov 2017 . Actualizado a las 08:01 h.

Una manada de perros de caza causó ayer alarma entre los usuarios de la carretera N-547 Lugo-Santiago, por donde los canes deambularon de mañana a la altura del cementerio municipal de Furelos, en Melide. Al camposanto se accede desde el vial nacional, que los perros -una decena- atravesaron poniendo en peligro la seguridad viaria en un tramo de la carretera por donde los vehículos circulan a considerable velocidad. Es un recorrido que tuvieron que hacer inevitablemente, puesto que hay imágenes en las que los canes aparecen delante del recinto de una empresa de carpintería metálica, localizada al paso de la carretera, en el lado opuesto al cementerio.

La presencia de los perros en la zona, donde no hay pasos subterráneos o elevados que salven los cruces viarios, enseguida corrió como la pólvora a través de las redes sociales, donde los internautas teorizaron sobre la posibilidad de que los animales estuviesen abandonados o que perteneciesen a una cuadrilla de caza, aunque esas últimas voces fueron las menos. Y esa última opción es la que evaluaron como más probable en el Concello de Melide, donde la Policía Local recibió la llamada de un anónimo alertando de la situación ya por la mañana.

Según cuenta la alcaldesa Dalia García Couso, los agentes se desplazaron al lugar y no avistaron por la zona a la manada y sí comprobaron como en la explanada del cementerio permanecían estacionados dos vehículos todoterreno con remolques propios para el transporte de canes de caza. Igual inspección realizaron por la tarde con igual resultado, tal y como confirmó la regidora melidense, quien explica que en las inmediaciones del cementerio se encuentra el tecor de Melide y desde el aparcamiento parte un camino que conduce al coto de caza, una disciplina que ayer estaba permitido practicar.

También en la protectora de animales de Arzúa, Apaca, recibieron desde Melide una llamada alertando de la presencia de los canes de caza en la carretera nacional. Desde el colectivo, que desarrolla una intensa campaña para frenar el abandono de canes en el Camino de Santiago, denuncian que entre la manada hay un perro malherido.