Una melidense lleva cinco años pidiendo un aparcamiento para su hija discapacitada

Natalia Rodríguez Noguerol
N. noguerol MELIDE / LA VOZ

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La madre de la menor reclama sin éxito la señalización de una plaza en la vía pública

11 oct 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Desde que Sonia Edreira solicitó formalmente por primera vez en el Concello de Melide una plaza reservada para el estacionamiento de personas con movilidad reducida han pasado 5 años. Le sería de gran utilidad en las proximidades de su vivienda, ubicada en la travesía urbana de la carretera autonómica que conduce al municipio de Agolada, por las limitaciones que tiene su hija Érica, una menor con una discapacidad reconocida física, psíquica y sensorial del 65 %. Sin embargo, «non recibín ningunha resposta, nin para ben, nin para mal», afirma la mujer, que ayer ha vuelto a tramitar la petición ante la administración local y ahora también ante la Xunta de Galicia, titular de la carretera en la que habría que señalizar la plaza, la AC-840.

A diferencia de entonces, se quedó con una copia de la solicitud, en la que reitera su demanda y esta vez, además, con el añadido de que la plaza también resultaría de especial utilidad para el transporte adaptado en el que Érica se desplaza a diario al centro de enseñanza especial al que asiste desde este curso en Santiago. Esta vecina de Melide explica en el escrito que «tanto o vehículo familiar como, e sobre todo, o transporte escolar se atopan habitualmente con dificultades de estacionamento nas proximidades do domicilio», donde «non hai ningunha praza de aparcamento reservada para discapacitados».

Al margen de la petición formal a las administraciones local y autonómica, Sonia Edreira cuenta que a su hija «hai que desprazala constantemente en coche», por lo que ante la falta de un espacio reservado para estacionar en las inmediaciones de su vivienda «meto e saco o coche do garaxe unhas cinco veces ao día». La madre de Érica ha decidido romper el silencio público que mantuvo hasta la fecha ante las «evasivas» con las que considera respondió el gobierno que encabeza la alcaldesa del PP Dalia García Couso al grupo municipal del PSdeG, desde el que, en los últimos meses, presentaron sendos ruegos plenarios instando a dar una respuesta al problema que aún no ha llegado.

«Recorrín á oposición porque xa me parecía unha tomadura de pelo total», explica la mujer, convencida, en vista de las respuestas que obtuvieron los socialistas, de que «nunca antes trasladaron á Xunta a miña petición». Explica al respecto que, a las puertas de las elecciones municipales de 2015, un miembro del gobierno local «confirmoume que a Xunta autorizara a praza e que só estaban pendentes de saber se os traballos para sinalizala correspondíanlle ou non ao Concello».

Esa misma respuesta, que la afectada recibió de palabra hace más de dos años, fue la misma que obtuvo el PSdeG melidense a raíz del ruego plenario que presentaron durante la sesión del pasado mes septiembre. El portavoz del grupo municipal socialista, José Antonio Prado, considera que «cando non hai sensibilidade nin vontade, búscanse desculpas».