Goles con nombre de mujer

Natalia Rodríguez Noguerol
natalia noguerol MELIDE / LA VOZ

MELIDE

Natalia Noguerol

El Melide es el primer equipo femenino que se federa en el municipio

19 oct 2016 . Actualizado a las 08:35 h.

Cuando se juntan ganas, ilusión y trabajo, y las canaliza el apoyo de un padre, no hay vuelta de hoja.... Echan a rodar equipos como el que este fin de semana debutó en la Liga Provincial femenina de fútbol sala. Con un cuatro a cero en el marcador y jugando en casa se estrenó en esa categoría el conjunto sénior del Club Melide Fútbol Sala, un viejo proyecto que resurgió por iniciativa de los padres de las quince jóvenes melidenses que corren detrás del balón en la primera alineación de camisetas con nombre de mujer que se federa en la localidad.

Fue el año pasado de la mano del Concello, tal y como cuentan los propios padres, que quisieron darle un empujón a sus pequeñas «porque non tiñan moito con quen competir a nivel comarcal». Se iniciaron de muy niñas en la disciplina dentro de las escuelas deportivas municipales, «que lles deron moi boa base», pero, como ellas mismas corroboran, «teníamos que jugar con los chicos porque no éramos suficientes para formar equipo». Y de la minoría en un deporte con sobrepeso masculino nació el conjunto. Empezaron a competir en cadetes -donde seguirán haciendo lo propio a partir de finales de mes- y esta temporada dieron el salto a la liga provincial luego de que tres jugadoras hayan dejado atrás los 15 años que, como mucho, se pueden tener para jugar en cadete. «Non querían rachar co equipo, querían seguir xogando todas xuntas e en categoría feminina non hai xuvenil», cuenta Fran Monterroso Gómez, que, junto con Pablo Gómez Remeseiro, se encarga del entrenamiento de las chavalas.

Dos entrenamientos por semana

Apunta Fran que el conjunto que preparan en dos sesiones semanales de hora y media se caracteriza, además de por ser unido, porque «son unhas rapazas que veñen con moita ilusión». «A diferenza cos nenos -explica - é que o toman doutra maneira, resulta máis doado traballar con elas, son máis intelixentes, máis disciplinadas e organízanse mellor para compaxinar o fútbol cos estudos». Son mayoría en el plantel del Melide Fútbol Sala las que no llegan a los 16 años y compaginan sus clases en el instituto de la localidad con su afición por el cuarenta por veinte. En la práctica del deporte también las jugadoras señalan diferencias con los chicos: «Sus partidos son más de fuerza y los nuestros, de cabeza, aunque jugando con ellos se aprende mucho, tienen más seguridad», dice Elisa Pampín junto a sus compañeras.

Ilusión también sobra entre los padres. Son «nuestros seguidores más incondicionales», apuntan las chicas. Y así lo reconocen ellos. Cada partido de sus pupilas, en casa o fuera, sienta en la grada para animar -«como persoas, que é a base do deporte», apuntan- a, como mínimo, treinta papás y mamás. «É aí onde se ve o implicada que está a xente, a ilusión que hai», afirman. «Para nós é un orgullo porque se trata dun equipo feminino dentro dun deporte minoritario e nun pobo», indica José Valcárcel.