Los tres puentes de Frades que destrozó el temporal estarán operativos antes de un mes

Emma araújo SANTIAGO / LA VOZ

FRADES

CEDIDA

La reconstrucción de los viaductos, financiada por Medio Rural, ha costado 120.000 euros

08 nov 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Las intensas lluvias que el pasado enero provocaron múltiples destrozos en el área metropolitana de Santiago afectaron especialmente a la red viaria del municipio de Frades, en el que tres puentes quedaron completamente inservibles, por lo que fue necesaria su reconstrucción prácticamente desde cero.

Tras meses de tareas, las obras en los tres viaductos están muy avanzadas, según anunció ayer el gobierno local, que calcula que para principios de diciembre los puentes estarán abiertos. El coste final para su reapertura rondó los 120.000 euros, una partida presupuestaria asumida por la Consellería do Medio Rural a través de su Plan Especial de Emerxencias.

Los viaductos reconstruidos son los de Xeza, Reboredo y Raselo. En el primer caso, la empresa Contrucciones José Lagares es la encargada de una obra cuyo coste ronda los 60.000 euros, una partida necesaria para demoler el antiguo viaducto para sustituirlo por otro de hormigón armado de ocho metros de ancho. Y cuando este paso esté terminado, el proyecto continuará con la reposición de cuarenta metros de carretera, que tendrá una barandilla metálica para reforzar la seguridad vial.

En cuanto al viaducto de Reboredo, ubicado sobre el Rego de Maris, la solución adoptada consiste en instalar un marco de hormigón prefabricado de diez metros de largo con muros de granito. En la red a la que da servicio el puente también habrá que reponer cuarenta metros de carretera con zahorra artificial, procediéndose también a instalar doce metros de barandilla.

La obra que avanza a un ritmo más lento es la del viaducto de Raselo, en la parroquia de Gafoi, un trabajo encargado a Construcciones Groba, la misma empresa que levanta el puente de Reboredo.

Tras haber derribado lo que quedaba del antiguo puente, que también quedó inservible, los operarios de la empresa adjudicataria están colocando las piezas del nuevo viaducto, ya que la solución técnica adoptada consiste en un diseño a base de cajones prefabricados de hormigón pretensado, material que permite reducir el impacto del puente sobre el río Maruzo.

En este caso, el nuevo puente tendrá mayores dimensiones que el viaducto anterior, por lo que resultará más seguro. Precisamente este cambio está complicando los trabajos, cuyo coste asciende a 59.754 euros. Cuando esté listo, los vehículos circularán por un trazado de carretera de seis metros de ancho sobre un paso elevado sobre el río de 4,5 metros de altura.