Retorno a clase con caceroladas por el cierre de un aula en Brión

La Voz SANTIAGO / LA VOZ

BRIÓN

Sandra Alonso

Dicen que derivaron a Bastavales a un niño que pidió Sabaxáns

10 sep 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

La movilización de las familias por el cierre de un aula marcó ayer el inicio del curso de los 18 alumnos matriculados en la unitaria de Sabaxáns (Brión). Para dejar constancia de su malestar, optaron por protestar a la entrada y salida de los pequeños con sendas caceroladas. Es la estrategia que seguirán en los próximos días para intentar que la Consellería de Educación atienda sus demandas y revierta su decisión de meter en una misma clase a un grupo heterogéneo, con alumnos de edades comprendidas entre los 3 y los 6 años. En todo caso, las familias, que el miércoles participaron en la movilización de la Confederación de Anpas ante San Caetano, no descartan incluso dejar de enviar a los niños a clase como medida de presión.

Porque el malestar de los padres y madres de los pequeños de Sabaxáns sigue creciendo. Aseguran que una familia de Bastavales pidió a una profesora escolarizar a un hijo en la unitaria de Sabaxáns y que le respondieron que debía ser matriculado en Brión, porque de lo contrario tendrían que abrir un aula más en la unitaria. Las familias entienden que esa negativa evidencia que Educación no está dispuesta a dar marcha atrás en el cierre del aula de Sabaxáns, incluso aunque exista un número de solicitudes de matrícula que hace necesario que estén abiertas las dos que ya funcionaron en el curso pasado. Los padres y madres afectados insisten en que tienen el apoyo de los tres grupos políticos con representación en el Concello de Brión -PSOE, PP y BNG- y que les consta que están moviéndose para defender su causa, aunque por ahora sin éxito.