Adolfo Gacio, exalcalde de Boqueixón, tras el archivo de su causa en la Pokémon: «Estiven sete anos sen pasaporte»

La Voz SANTIAGO

BOQUEIXÓN

GUSTAVO RIVAS

El exregidor critica con dureza a la jueza Pilar de Lara y lamenta que no hubiese juicio para poder demostrar su inocencia

11 feb 2024 . Actualizado a las 19:30 h.

«Non sentín nin frío nin calor». Así describe Adolfo Gacio, exalcalde de Boqueixón por el PP, la sensación que tuvo al conocer la decisión del Juzgado de Instrucción número 1 de Santiago de archivar la pieza de la operación Pokémon que le afectaba, la relativa a la concesión a la empresa Vendex del servicio municipal de ayuda en el hogar. Un sobreseimiento que, además, la magistrada compostelana Ana López-Suevos ha hecho con duras críticas a la jueza que instruyó la causa cuando estaba en Lugo, Pilar de Lara Cifuentes, que para el exregidor «non é mala, senón malísima. Non sei como algunha xente pode chegar a estar onde está, sobre todo porque estás a xogar con persoas e familias enteiras».

A Gacio no le faltan motivos para estar indignado con el trato que le ha dado De Lara. Ha estado once años y cinco meses imputado. Fue detenido, pasó dos días y una noche en el calabozo, tuvo que pagar una fianza de 10.000 euros para no ir a prisión provisional y estuvo nada menos que siete años sin pasaporte. De ellos, cuatro yendo a firmar al juzgado cada semana y tres cada quince días. Además, tuvo que dimitir como alcalde de Boqueixón porque se lo pidió el PP. Hasta consecuencias familiares le conllevó la operación Pokémon, «porque custoume o meu divorcio», lamenta. «Se houbera probas contundentes ou algo, pode ser, pero non, esta señora disparou contra todos os que contratáramos coa empresa Vendex».

El archivo de la pieza en la que estaba afectado le ha aliviado, pero no satisfecho. «A miña intención foi sempre ser xulgado por un tribunal imparcial por eses presuntos delitos que nunca cometín, para aclarar estes temas sobre onde a xuíza De Lara nunca se pronunciou. Once anos e medio nos que esa xuíza non moveu un papel, nin ordenou ningunha dilixencia a pesar de chamar a ducias de testemuñas», se queja, y admite que está «indignado» con la actuación de la polémica magistrada. «Nunca debeu acceder á carreira xudicial pola súa falta de imparcialidade. Calquera funcionario, que eu tamén fun, estaría inhabilitado de por vida de facer o que fixo ela», asegura.

También quiere «acusar públicamente» a los agentes de Vigilancia Aduanera, cuerpo que actuó como policía judicial en este caso, «que en máis de once anos non aclararon nada», señala. Más de una década en la que asegura haber sufrido una «morte civil» por culpa de la lentitud de la justicia. «A xustiza ou é inmediata ou non é xustiza», afirma el que fue alcalde boqueixonés entre 1991 y 2012. En estos largos años, Adolfo Gacio sí asegura haber sentido el apoyo «da práctica totalidade dos veciños de Boqueixón, que non dubidaron da miña honestidade e honorabilidade». Un agradecimiento que el exregidor de este municipio extiende a sus tres hijos, su hermano, su cuñada, a sus sobrinos y también a sus amigos.