Susú Cores deja el Boimorto para recalar en el fútbol de Ecuador

Álvaro Sevilla Gómez
ÁLVARO SEVILLA LA VOZ / SANTIAGO

BOIMORTO

PACO RODRÍGUEZ

Esta temporada fue la primera mujer en dirigir un equipo gallego de Preferente

24 ene 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Susú Cores dejará Boimorto para recalar en el fútbol profesional de Ecuador. La ribeirense, que se convirtió esta temporada en la primera mujer en dirigir un equipo gallego de Preferente, cogerá las maletas para tomar las riendas del cuadro femenino de Independiente del Valle, Las Dragonas, de Primera División que se marca como objetivo para el curso que comenzará en marzo pelear por el título de liga y clasificarse para la Copa Libertadores.

Sobre si el paso ha sido sencillo, la barbanzana reconoció que «al principio tienes dudas, dejas todo atrás. La vida te cambia al 100 % pero pienso que es una oportunidad muy interesante que, si igual no aprovecho ahora, quizás no lo haga nunca». No será hasta el día 10 que cogerá el avión con destino a Quito, donde le espera su nuevo equipo. Atrás deja al Boimorto, cuyas riendas tomarán Manuel Millán y Alba Meilán, y su cargo como técnica de la selección gallega sub-15 femenina, con la que dirigió su última sesión este miércoles.

«Todavía no he tenido tiempo a parar, pero tengo sentimiento encontrados», afirmó la ribeirense, que se encontrará en Ecuador con otro vecino de la capital barbanzana, José Mato, que se ha hecho cargo de los equipos sub-18 y reserva del Independiente del Valle. Iván Vázquez y Luis Pastur son los otros gallegos que forman parte del cuerpo técnico del conjunto sudamericano.

Cores llega a Las Dragonas con la determinación de cumplir los objetivos marcados. «El club quiere pelear por el título de liga y entrar en la Copa Libertadores, esta última temporada se quedaron fuera por muy poco y este año es la meta prioritaria». No hace demasiado tiempo que esta técnica llamada a romper barreras reconoció en estas páginas que su sueño era poder vivir del fútbol: «La verdad es que poco después parece que se cumple en gran parte. Lo voy a conseguir, aunque quizás un poco lejos de casa [ríe]».

Aprovechar la experiencia

Ahora solo piensa en aprovechar al máximo la experiencia: «Tengo la oportunidad de trabajar de lo que más me gusta y de conocer una nueva cultura. Sé lo que dejo atrás, pero es una experiencia personal que espero que me pueda abrir más puertas y que me permita aprender un poco más. Después a ver si nos vamos acercando poco a poco».

Antes de marchar ha tenido tiempo de dejar al Boimorto en una buena situación para lograr su objetivo, que no es otro que la salvación. También ha cumplido con la selección, que se ha metido en la segunda fase de campeonato de España. Ahora falta el suyo, cumplir un sueño que llevaba esperando años a que se hiciera realidad. Las Dragonas esperan ya a una entrenador con ganas de comerse el mundo.