Boimorto moviliza este fin de semana a cien voluntarios para el Festival de la Luz

Natalia Rodríguez Noguerol
n. noguerol ARZÚA / LA VOZ

BOIMORTO

La artista Luz Casal junto a una de las propiedades de su familia en la primera edición.
La artista Luz Casal junto a una de las propiedades de su familia en la primera edición. álvaro ballesteros< / span>

Regularán el tráfico rodado en los accesos al recinto en la aldea de Orros y el aparcamiento para unos 4.000 vehículos

12 sep 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

A media tarde de ayer, comenzaron a caer sobre Boimorto las primeras gotas que anuncia la previsión meteorológica para este fin de semana. La lluvia será lo único que pueda aguar el Festival de la Luz, el evento musical que, desde hace tres años por estas fechas, rompe la rutina en Orros, la aldea natal de la artista que alumbró el festival y donde todo está preparado para el disfrute de las miles de personas que pisarán la finca en la que se encuentra la casa donde nació Luz Casal.

De que el festival salga a pedir de boca saben mucho los trabajadores del Concello de Boimorto, que, solo en voluntarios, ha movilizado a un centenar de personas, del propio municipio, y de otros como Arzúa y Melide, principalmente. Se encargarán de regular el tráfico rodado en los cruces de carretera para que los asistentes lleguen con toda seguridad al recinto del festival, de mantener un orden en el aparcamiento habilitado para unos 4.000 vehículos y de que los aseos estén siempre limpios.

Será la labor visible para los miles de asistentes al Festival de la Luz, pero en la organización, el personal municipal lleva trabajando un mes y desde hace quince días las jornadas son maratonianas. Es lo que se deduce hablando un rato con Yolanda y Silvia Cea, dos de las trabajadores del Concello de Boimorto volcadas con la cita, siempre al pie del cañón. «Está entrando moitísima xente», comentaban mirando al cámping en la jornada de apertura ayer del festival. Sobre unos 500 ya estaban acampados. Y lo gordo está hoy por llegar.