Un párroco entregado al que consagró el cardenal Quiroga

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Arzúa despidió este viernes a José Ramón Cascón Raposo

04 dic 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Arzúa despidió este viernes a José Ramón Cascón Raposo, sacerdote que entregó su vida al oficio religioso tras su consagración como presbítero por el cardenal Quiroga Palacios. El padre Cascón falleció a los 90 años de edad y en su despedida sus familiares y amigos estuvieron acompañados por una treintena de sacerdotes, que se desplazaron hasta Arzúa para dar el último adiós a quien ejerció, durante cuatro décadas, como cura párroco del también municipio coruñés de Pontedeume. Después de su jubilación, hace un lustro, regresó a su localidad natal, donde continuó ejerciendo labores sacerdotales hasta que la salud lo obligó a colgar definitivamente los hábitos.