Inmortalizó los momentos felices de las familias de la comarca arzuana
12 feb 2021 . Actualizado a las 09:38 h.Perfecto Mosteiro Sánchez, Chicho para su familia, era una persona extremadamente afable. De esas que, cuando entraban en un local, la gente se volvía para verla, porque irradiaba vitalidad y optimismo. A Perfecto lo conoce todo el mundo en Arzúa, y como diría él mismo «también en medio mundo».
Durante muchos años, y hasta no hace tanto, Perfecto fue el único fotógrafo de Arzúa. Con su cámara no solo capturó las fiestas tradicionales de su pueblo, sino que también inmortalizó las imágenes de los rincones más sobresalientes de Arzúa, porque Perfecto ejercía de embajador de su pueblo y no perdía ninguna oportunidad para mostrar la belleza del lugar donde nació y del que nunca quiso irse.
Resultará difícil encontrar una familia de Arzúa y de los municipios de las comarcas próximas a los que no haya fotografiado en los momentos más felices de sus vidas, por eso su fallecimiento dejará helado a más de uno. En su estudio de fotografía, dotado con todas las innovaciones y equipos de última generación, se quedan ahora Mariluz, su mujer y compañera de vida; y sus hijos Perfecto y Víctor, el relevo generacional.
Dejando al margen su indiscutible calidad profesional, Perfecto Mosteiro, que primero fue destacado defensa central y después directivo del club de fútbol de Arzúa, será recordado por su insuperable sentido del humor y por su capacidad para derrochar cariño.
Quienes lo conocieron saben que no dejó de pelear hasta su último aliento, con el único objetivo de volver con su familia. No será fácil decirte adiós, y será duro superar estos momentos sin tu abrazo de consuelo y tus besos reponedores.