
Bruno García falleció de forma repentina cuando regresaba de Teixeiro tras haber participado en el operativo de limpieza y desinfección del entorno del centro penienciario
30 abr 2020 . Actualizado a las 23:23 h.Los bomberos de Arzúa se quedaron huérfanos. Así se lee en una de las numerosas y emotivas despedidas que recibió, a través de las redes sociales, Bruno García Mallo, sargento-jefe del parque comarcal arzuano, donde trabajaba desde hace dieciséis años. Dijo adiós hoy día 29 en acto de servicio un gran profesional y mejor persona, trabajando en tareas de desinfección en las inmediaciones del centro penitenciario de Teixeiro. Es la opinión unánime de compañeros de oficio y vecinos, que lloran la pérdida y honran la memoria de un hombre servicial, sensato, y con excepcional vocación y sentido de la responsabilidad en el desempeño del servicio a la ciudadanía.
El presidente de la Diputación, Valentín García, ha trasladado su pesar, en nombre de toda la corporación provincial, por la temprana e inesperada pérdida de Bruno García, de quien destacó su compromiso y esfuerzo durante su dilatada trayectoria profesional.
Al pésame se sumaron los concellos de Melide y Arzúa. También en Ordes, de donde era orginario Bruno García, lo que le permitió ser uno de los promotores en el año 1994 de la agrupación de protección civil y en donde trabajó como bombero hasta incorporarse al parque arzuano.