Los agraciados con 14,6 millones en la primitiva son doce vecinos de Arzúa, en su mayoría trabajadores de Correos

En Arzúa no se habla hoy de otra cosa. Y no es para menos. No todos los días se sella en la localidad un boleto de lotería premiado, menos con una cantidad ingente de millones, que, para más inri, le harán la vida más fácil a vecinos y por todos conocidos. La primitiva validada en la administración número 1 del municipio coruñés, O Rei Midas, con un premio de 14.649.902 euros era una de las cinco apuestas que, desde hace más o menos un año, cubren semanalmente en la peña de doce personas, formada, en su mayoría, por trabajadores de Correos de Arzúa, donde solo las felicitaciones vecinales interrumpieron la rutina laboral de los agraciados. El único amago de celebración fueron los vinos a los que invitó a un grupo de paisanos en un bar cercano a la oficina postal Avelino Ares, uno de los afortunados, aunque «sigo sendo o mesmo de antes; polo de agora non vin nada», decía.

Avelino fue el único premiado que, aunque cauto, rompió el silencio mediático que imperó entre los premiados. Hablaron el resto de los vecinos, que estaban felices. Como Susana Quintela, la lotera. La buena fortuna fue a parar a donde ella manifestó desear cuando en la noche del jueves confirmó que la apuesta premiada se había sellado en su despacho. «Lo que mejor podía pasar, paso. Está repartido, entre gente de Arzúa y trabajadora», afirmaba, satisfecha, la mujer. A ella también le llovieron las felicitaciones por el premio, el más grande que repartieron en el despacho de lotería que fundó su padre hace más tres décadas. Y ya llevan unos cuantos. Seis nada desdeñables en la última década. Solo les queda por repartir suerte en el Euromillón y en el sorteo de los sábados de la Lotería Nacional.

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