Ella empezó con pilates para combatir el estrés del desempleo y ahora funda su propio centro en Ames
AMES
Lucía Vila llevaba tiempo soñando con poner en marcha este proyecto y el día 1 abre una nueva etapa en O Milladoiro
19 ene 2023 . Actualizado a las 10:01 h.Llevaba toda su vida dedicándose al deporte, pero en comercio. «Estaba un poco harta de eso y, hace un par de años, quise hacer un cambio radical a nivel laboral. Fue en plena pandemia. Me quedé sin trabajo y para mí fue muy agobiante porque nunca había estado sin empleo», cuenta Lucía Vila González. Esta amiense (de Biduído) de 36 años, de carácter inquieto y energía desbordante, empezó en aquel momento a hacer pilates para combatir esa situación de estrés.
«Había probado el pilates para embarazadas y justo después del confinamiento me apunté a un curso. Me enganchó tanto que, al acabarlo, me contrataron en el mismo centro de Santiago al que iba como alumna». Comenzó a dar clases en octubre, y entonces ya empezó a mascar la idea de tener un centro propio. Es «un sueño», dice, y cuando vio el momento de llevarlo a cabo no quiso dejar pasar la oportunidad. Así es como se fraguó Pilates Arabesque, un espacio que iniciará su actividad el 1 de febrero en la rúa da Costa Grande, en O Milladoiro. Especializados en pilates máquina, «a diferencia del que se realiza en el suelo, empleamos elementos que facilitan mucho los ejercicios, recomendados incluso para personas que padecen patologías», explica Lucía.
Arranca con cadillac y reformer. «La primera es una máquina parecida a una cama que funciona con muelle y ayuda a realizar los movimientos, a la vez que protege y fortalece el músculo para que las personas con una lesión no sufran. Y el otro es un carro que se desliza ejerciendo fuerza con unos muelles y la resistencia se puede cambiar para subir o bajar la intensidad». Explica la amiense que lo que a ella le enganchó del pilates es «que te da un bienestar general, tanto anímico como físico. Y a mí, que soy súper nerviosa, me da calma, y en las clases cambio radicalmente. Lo que más me gustó es que ves cómo vas evolucionando». Aunque había echo antes infinidad de deportes (surf, escalada, natación, vóley...) y partía de una buena base física, aún así notó cómo mejoraba su elasticidad, coordinación y postura corporal, hasta al conducir. «En general, te sientes más ligero, alargas la columna y cuesta menos trabajo coger peso, porque lo haces de la forma correcta y supone menos esfuerzo», destaca. No obstante, aclara, «cualquier persona puede hacer pilates. Nosotros damos clases a partir de los 12 años y tenemos también grupos de terapéutico para tratar algún tipo de lesión. Más adelante pondremos también en marcha las de pilates para embarazadas y posparto. Nunca hay más de cinco personas en el aula para que yo pueda corregir las posturas y ayudar a cada alumno; y se adaptan a cada nivel, incluso para los que nunca hicieron ejercicio». Y, para aquellos que aún tengan dudas, ofrecen la primera sesión de forma gratuita y una promoción de apertura con la matrícula a coste cero.