Despeja las dudas arqueológicas y licitará en noviembre los primeros trabajos
26 sep 2017 . Actualizado a las 05:00 h.La estación depuradora de O Souto empieza a ver el camino despejado. Después de que en junio pasado Acuaes decidiese el aplazamiento de la firma del convenio, la rúbrica verá la luz por fin en octubre. Así se lo indicó ayer la responsable del organismo estatal dependiente del Ministerio de Medio Ambiente, María Aránzazu Vallejo, al director xeral de Augas de Galicia y el concejal Xan Duro. Las tres administraciones implicadas salieron ayer concordantes y satisfechas de la reunión a tres bandas mantenida en Madrid, con los técnicos como testigos.
En aquella cita de junio Acuaes se había comprometido a realizar una serie de aportaciones sobre el caudal de agua y otros ajustes en el tratamiento de la planta, así como los estudios arqueológicos. Esos trabajos ya están finalizados y un informe de la Universidade de Santiago aclara respecto a tres posibles petroglifos detectados que dos de ellos no son tal, sino formaciones geológicas. El tercero sí es un petroglifo, y además es trasladable. No obstante, todo ello está pendiente de un informe final de Patrimonio. Es decir, toda esta problemática se va a solventar sin incidencias añadidas respecto a aquellas de las que ya se tenía constancia.
En consecuencia, ayer se acordó la firma del citado convenio, que lleva muchos meses aguardando y que dará pie al desarrollo de la actuación programada en O Souto por un importe de 56 millones de euros, sin contar el IVA. Aunque los plazos están cada vez más ajustados, Madrid acaba de adoptar una decisión que permitirá ganar terreno a la tramitación. Una vez rubricado el acuerdo interadministrativo, en noviembre se licitará la fase cero de la obras: el acceso a la zona de la intervención, el movimiento de tierras y las actuaciones geológicas. El proyecto ya está en redacción y dentro de unos diez meses podrá completarse este primer recorrido, que tendrá un coste de 7 millones.
Acuaes la gestionará cinco años
En paralelo, Madrid culminará la redacción del anteproyecto con el informe de Patrimonio ya listo, redactará y licitará el proyecto constructivo y desarrollará los trámites que faltan con el objetivo que la depuradora esté en funcionamiento en el año 2023, plazo máximo concedido graciosamente por la UE tras ampliarlo.
Uno de los aspectos novedosos que salió ayer del despacho de Aránzazu Vallejo es que la sociedad pública Acuaes explotará durante cinco años la nueva estación depuradora, de forma que en ese tempo pueda comprobar que todo funciona correctamente y está en las mejores condiciones. El gestor de la planta será el Ayuntamiento de Santiago.
La conclusión de las obras llegará antes de que finalicen los plazos previstos. Al menos eso es lo que aguardan las tres administraciones, que esperan ver la planta de O Souto en período de pruebas en el año 2022.
Ministerio, Xunta y Concello exhiben su unidad para ejecutar el proyecto de la nueva planta
Las tres administraciones implicadas (Ministerio de Medio Ambiente, Xunta y Concello) se mantienen en la misma línea en lo que concierne al proceso de tramitación y ubicación de la planta de O Souto, conscientes de que cualquier nuevo imprevisto haría peligrar los plazos y los fondos europeos. «É un gran reto que ten unha prioridade absoluta, e nós estamos facendo un importante esforzo. Imos aportar a metade dos fondos non europeos», señala el presidente de Augas de Galicia, Roberto Rodríguez, que asistió a la cita de ayer.
Las administraciones saben de las reticencias que el proyecto suscita en Ames, pero piden tranquilidad por la «nula afección dende o punto de vista ambiental». La tramitación ambiental se ha realizado «con garantías», resalta Roberto Rodríguez. El hecho de que las máquinas estén operando en los primeros meses del 2018 invita al optimismo entre los responsables administrativos, que hasta ahora veían pasar el tiempo con preocupación.