Santiago Amor cerró el acto afirmando que cuando llegó a la alcaldía se encontró con un despacho vacío y una elevada deuda municipal que ahora, cuatro años después, se había rebajado.
El candidato dijo que tenía «mais ilusións que hai catro anos» y anunció más energías para continuar con la gestión de un concello que presentó como un municipio especialmente joven con un «nivel de servizos e esixencia moi alto» y que tras cuatro años de trabajo, la gestión del PP ha revertido la situación económica que encontraron. De hecho, Amor comparó al anterior gobierno «coa orquestra do Titanic, que seguían tocando mentras o barco se afundía». Ahora, añadió, «o barco está en rumbo, pero ten que chegar a porto».