De primero, lacón con grelos en Ordes, y de postre, filloas da pedra en A Baña

j. c., E. F. santiago / la voz

A BAÑA

Las filloas de A Baña se hicieron en una treintena de piedras.
Las filloas de A Baña se hicieron en una treintena de piedras. forxán< / span>

El buen tiempo ayudó y las dos citas del fin de semana con los fogones fueron todo un éxito de participación

14 mar 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Miles de personas se dieron cita en Mesón do Vento desde muy temprano en la 18 edición de la Festa do Lacón con Grelos, que junto a la Festa do Queixo de Arzúa y la de la filloa en A Baña se pelea por un hueco en el estómago de la comarca en las primeras semanas del año. Y lo cierto es que la gastronomía fue una disculpa, porque la oferta era mucho más amplia: talleres infantiles a pruebas con perros o una muestra de vehículos de ocasión y de maquinaria agrícola ampliaron la oferta de actividades. Las raciones de lacón con grelos repartidas sumaban casi 2.500 kilos. En la cita estuvieron el alcalde de Ordes y la directora xeral de Gandeiría, Belén do Campo.

Postre milenario

También disfrutaron ayer los alcaldes de las comarcas de Xallas y Barcala en A Baña. La filloa da pedra, ese postre milenario, sigue ganando enteros entre los entusiastas de que lo autóctono nunca será superado, en gusto y sabor, por otros postres que se han afianzado en nuestra gastronomía. Y prueba de ello, las miles de personas que ayer degustaron filloas da pedra a raudales en su exaltación anual en A Baña. El polideportivo municipal fue un ir y venir de gentes llegadas desde toda el área de Santiago para saborear más de cuatro mil unidades preparadas desde las ocho de la mañana, en alguna de las 36 piedras de la Asociación Filloas da Pedra, camino ya de los catorce años de vida tras la presente edición.

Un personaje tan querido en estos lares como Adelino Pose Reino, director del instituto Xulián Magariños, fue pregonero en la tierra natal de su familia y, de la que dijo: «É unha práctica gastronómica milenaria que nos leva a moi lonxe no tempo», al tiempo que señalaba que «a súa gran calidade débese á maestría das artesás, para manter a temperatura axeitada das pedras», junto a los productos típicos del rural barcalés como harina y huevos. Y recordó, que el malogrado Xosé Neira Vilas, ya dijo que las filloas se elaboraban en la antigua Grecia.

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