Tórculo entra en concurso de acreedores y una firma catalana plantea comprarla para seguir

La empresa compostelana Tórculo, un referente en el sector de la impresión y la comunicación gráfica, inició un concurso voluntario de acreedores, en el que cuenta ya con una oferta firme de compra de su unidad productiva por parte de un empresario del sector gráfico afincado en Cataluña. Desde la firma compostelana aseguran que esta propuesta «garantiza el mantenimiento de todos los puestos de trabajo, la preservación de la marca corporativa y la continuidad de la actividad de la empresa, en sus dos sedes de Santiago y Madrid, en las mismas condiciones operativas actuales, contando a la vez con el apoyo de la mayoría de los trabajadores y equipo directivo actual», así como de su principal proveedor tecnológico.

Añaden desde Tórculo que con esta iniciativa se abrirá una nueva etapa en su accionariado que, tras la compra por parte de la catalana consolidará su estabilidad económica «tras un período convulso de crisis y asegura la continuidad de sus servicios y estándares de calidad». Consideran que el cambio en la propiedad marca una transición estratégica para la compañía, pero «no impactará en el día a día de la actividad, que seguirá operando bajo los mismos principios y con el mismo equipo».

Con 54 trabajadores

La operación está todavía pendiente de algunos trámites administrativos, y busca asegurar la estabilidad de los profesionales de Tórculo y el respaldo a sus clientes y colaboradores.

La catalana Socigestal es la firma que presentó la oferta por Tórculo Comunicación Gráfica, y apunta su interés por la unidad productiva de la empresa compostelana por disponer de una tecnología diferencial que complementará su oferta comercial. En su propuesta recoge, entre otras cuestiones, no modificar los 54 contratos laborales y uno de dirección de Tórculo, asumiendo las obligaciones de un pasivo laboral que se calcula en 838.402 euros.

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