La edafóloga Beatriz Priego recuerda a Benita Silva: «Siempre quiso acercar su conocimiento a la sociedad»

manolo fraga SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

SANDRA ALONSO

Su libro póstumo sobre la piedra de los monumentos gallegos ve la luz

11 nov 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

«Toda mi vida estuve ligada a Benita. Fue mi directora de tesis y trabajé siempre con ella hasta su jubilación». Beatriz Prieto Lamas (Vigo, 1967), catedrática de Edafología de la Universidade de Santiago, y Teresa Rivas Brea, profesora del departamento de Ingeniería de Recursos Naturales y Medio Ambiente de la Universidade de Vigo, se han convertido en las editoras del libro póstumo La piedra de los monumentos gallegos. Formas de alteración y procesos de deterioro, obra de Benita Silva Hermo, que falleció en 2022. «Nosotras revisamos la documentación, pero ella es la autora. Siempre quiso publicar este libro, la obsesionaba poner todo su conocimiento científico al servicio de la sociedad; sobre todo, de profesionales de la restauración y conservación. Es un manual que, sin embargo, está escrito en un lenguaje divulgativo y accesible para cualquiera», tal como explica la profesora Prieto.

El libro, que será presentado el 15 de noviembre en el Paraninfo de la USC en un acto que también servirá de homenaje, reúne en una única obra (180 páginas) la totalidad del conocimiento científico del deterioro del granito en monumentos antiguos gallegos y lo hace de forma amena y clara, sin perder el rigor científico, según describe la sinopsis que aparece en la contraportada. En la presentación intervendrá el científico Francisco Díaz-Fierros, que escribió su biografía para el Álbum de Galicia del Consello da Cultura Galega, en la que califica a Silva como «pioneira europea no estudo dos monumentos graníticos».

La Catedral de Santiago era para la profesora Silva como «su casa», allí se presentaba en cuanto la llamaban, según relata su discípula Prieto. Y ahora ella hace lo propio, si bien discrepa de la restauración que se acometió en los últimos años. «Fue demasiado agresiva en limpieza y sustitución de piezas. Ya no es la fachada que nosotros conocimos, porque limpiaron demasiado. No eliminéis el liquen amarillo, no hace daño y es peor su retirada. Este tipo de liquen ya formaba parte del propio edificio, del propio patrimonio. Pues eso ya no existe y se lo dijimos siempre. El envejecimiento natural no se debía frenar, es la pátina del tiempo; porque, además, el granito envejece bien. Los problemas principales que tiene el granito son los efectos de las sales y el efecto del agua, que es el mayor agente de alteración. Y otra problemática es el biodeterioro causado por organismos vivos», advierte la experta.

Prieto también rememora su recorrido, en los años 90, por las iglesias rurales del tramo gallego del Camino Francés: «Tengo ganas de volver para comprobar lo que se ha mejorado tras las inversiones hechas tras la explosión jacobea. Hace treinta años estaban sin ningún tipo de conservación».

«Generosa y maestra»

Preguntada cómo era Benita Silva, a Beatriz se le humedecen los ojos sobre su propia respuesta. «Beni era generosa y maestra. Bajo su amparo nos permitió a sus pupilas desarrollarnos plenamente como investigadoras, dejando muchas veces que nosotras estuviésemos delante. Era una buena persona que acabó siendo nuestra amiga. De ahí que sintamos por ella toda la admiración y respeto», afirma la profesora Prieto.

Benita Silva entregó sus últimos años a Alumni USC, institución que la nombró presidente de honor «polo seu compromiso extraordinario e xenerosidade, proxectando a un rango superior a asociación de antigos alumnos universitarios».