Los placeros advierten que la expansión de las terrazas no evitará que la gente coma en el recinto del mercado

Margarita Mosteiro Miguel
marga mosteiro SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

PACO RODRÍGUEZ

Las mesas que piden los hosteleros serían de uso privado y tampoco pagarían tasas

22 mar 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

La instalación de 21 mesas, con sus respectivas sillas, distribuidas en varios puntos del interior y del exterior del recinto de la Praza de Abastos no evitará la presencia de personas, mayoritariamente turistas, comiendo por todos los rincones del mercado. Los placeros sostienen que esto es así porque esas nuevas terrazas serían solo para uso de los clientes de las 11 empresas de hostelería de la nave 5. Así pues, los clientes que compran productos en otros establecimientos de alimentación de la Praza no podrán hacer uso de esas mesas para comer, y no se evitarán las escenas que se repiten, sobre todo, en verano.

Recuerdan los comerciantes que, en su origen, en la nave 5 había una única mesa, situada en el centro, en la que podían comer todos los clientes del mercado, independientemente del lugar donde adquirieran sus productos. Tras su retirada, el Concello terminó autorizando la colocación de mesas vinculadas a cada espacio gastronómico, ante la insistencia de que las barras se quedaban pequeñas para degustar alimentos. La instalación de esas terrazas interiores de la nave 5 no implicó el pago de la tasa por terraza que abonan todos los locales de hostelería de la ciudad al Concello, ni tampoco un incremento del canon que pagan a la cooperativa, que es de 114,99 euros por casilla, exactamente el mismo que pagan todos los placeros del interior de las naves del mercado.

En el caso de que se autorizase la ampliación de la terraza, tampoco se les podrá cobrar ninguna tasa, al menos por las mesas del interior del recinto. Eso es así porque el contrato entre la cooperativa que gestiona la Praza y el Ayuntamiento —propietario del recinto— no lo permite, según confirmaron diversas fuentes. Otra cuestión son las ubicadas fuera del recinto del mercado, como es el caso de las cuatro mesas de la rúa das Ameas, asignadas inicialmente al restaurante Salvaxe según el proyecto entregado al Consello Rector para su evaluación. En esta calle, el local Abastos 2.0 —que paga un canon de 139,02 euros por casilla a la cooperativa— abona además al Concello las tasas por tres terrazas: la situada frente a su local, la del lateral, y la de la barra.

El canon de los locales de hostelería de la nave 5 —los referidos 114,99 euros al mes por cada casilla— incluye la recogida de basura, luz del pasillo y el uso del baño con provisión de papel higiénico, así como la limpieza de la nave hasta las 15.00 horas. A partir de Semana Santa, y durante toda la temporada alta, los locales tienen un horario más amplio que el comercial, por lo que la cooperativa de la Praza les instó para que asumieran la limpieza de los baños fuera del horario estrictamente comercial. Finalmente, fue la propia cooperativa la que contrató personal para este fin, y cobra el sobrecoste repartido entre los empresarios.