Francisco Loimil: «Lo más urgente es tomar conciencia de la ciudad, hay que mover el árbol»

Cuatro siglos recorren la Real Sociedad Económica de Amigos del País de Santiago, ya que la entidad sin ánimo de lucro nació en 1784 bajo el reinado de Carlos III con la finalidad de difundir las nuevas ideas y conocimientos científicos y técnicos de la Ilustración. Francisco Loimil Garrido (A Estrada, 1956), economista y auditor de cuentas, preside una junta directiva que quiere revitalizar su actividad: «Pretendemos hacer en el siglo XXI lo que hicieron nuestros antecesores en el pasado. Queremos ser un factor de dinamización económica, social y cultural. Pensamos que siguen vigentes los valores de la Ilustración a la hora de fomentar la industria y la tecnología, además de darle un campo a la sociedad civil».

Compostela 2023-2027. Presente y futuro es el título de un ciclo de mesas de debate que arranca el próximo día 21, en su sede de la Praza de Salvador Parga, con la mirada puesta en la universalidad de Santiago. Xosé Luis Barreiro Rivas será el ponente y Luis García Varela, el moderador. A esta primera conferencia le seguirán a lo largo del año otras que versarán sobre el asociacionismo; las infraestructuras públicas; la gestión cultural; los medios de prensa en la capital de Galicia; espacios verdes y salud urbana; industria y servicios; centro, periferia y medio rural en Santiago; y fiscalidad municipal. «Nuestra idea es aportar conocimiento y contraste de pareceres, de ahí que programemos mesas de debate en los que habrá diversos puntos de vista. Queremos crear inquietud a partir de un debate constructivo y sin confrontación. Y, al escapar de la visión partidista, nos sentimos con mayor libertad para debatir con argumentos sólidos», según explica Pancho Loimil, como se le conoce.

Entrando en las preocupaciones compostelanas que tiene la Económica, el presidente señala que la ciudad «no crece», el turismo es el «único valor» y «faltan sinergias» entre la universidad y el tejido empresarial; si bien reconoce que el Biopolo A Sionlla, cuya inauguración se prevé en las próximas semanas, es un punto de arranque, pero «no es suficiente», advierte. «Lo más urgente es tomar conciencia de ciudad, hay que mover el árbol. Acabamos de quedarnos sin una cabecera periodística propia y hace años que no disponemos de una televisión local. Necesitamos medios de comunicación con personalidad para que esta ciudad avance. Se impone desarrollar un modelo de ciudad más eficiente», según destaca Loimil. «Siempre fuimos muy acomodados», añade.

Amigos del País de Santiago es la entidad privada más antigua de Galicia y, entre sus hitos históricos, figuran el impulso de la línea férrea de Cornes a Carril —la primera de la comunidad— y del Panteón de Galegos Ilustres en Bonaval; así como la creación de una escuela de mujeres, promocionando su formación en una época en que ellas no estudiaban. Y en el decenio de los ochenta del siglo pasado, llegaron a tener cinco mil alumnos que estudiaban música, dibujo, pintura, mecanografía, vidrieras… «Poseemos una pinacoteca con un valor significativo, integrada por un centenar de pinturas, entre las que hay seis Fenolleras. Por cierto, hay muchas colecciones privadas cuyos titulares estarían dispuestos, igual que nosotros, a depositarlas en un museo de la ciudad, un espacio museístico que también demandamos», señala Loimil. El patrimonio de la propia sociedad también lo divulgarán con charlas sobre sus piezas museísticas.

Y recientemente la Real Sociedad Económica de Amigos del País de Santiago ha participado en un encuentro en Madrid con sus homólogas de España (14 en total) en el que acordaron desarrollar actividades conjuntas, además de haber creado el Premio Carlos III.

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