Bugallo asume provisionalmente la concejalía de Medio Rural de Santiago hasta que complete su equipo
SANTIAGO
La sustituta de Pichel tomará posesión del cargo en tres semanas y el regidor resolverá entonces quién llevará esa competencia
20 ene 2023 . Actualizado a las 13:03 h.El alcalde asumirá directamente, y de forma provisional, las competencias de la concejalía de Medio Ambiente, que anteayer quedó vacante por la dimisión de José Manuel Pichel a raíz del caso del alquiler por parte del Concello de un inmueble en el polígono de Costa Vella a una empresa con la que el concejal había tenido vinculación. Pichel no advirtió sobre esa relación al alcalde ni a la Xunta de Goberno que decidió esa contratación directa, y de la que formaba parte, según reconoció al dimitir. El ya exedil admitió que había cometido un «error considerable» al no informar y anteayer presentaba su renuncia. Su marcha ha dejado al gobierno de Xosé Sánchez Bugallo con ocho ediles y pendiente de atribuir las competencias que tenía este.
Inicialmente las asumirá el propio alcalde. Esa es su intención hasta que se incorpore la candidata que sustituirá Pichel, Begoña Rodríguez, la siguiente en la lista socialista. Y salvo que delegue directamente en esta esas atribuciones, el regidor tendrá que reorganizar de nuevo su gobierno. Ya lo hizo recientemente, a finales de noviembre, después de la dimisión del concejal de Obras, Javier Fernández, quien abandonó el gobierno local, aunque se mantuvo en la corporación como concejal no adscrito. Entonces, los cambios afectaron a Gonzalo Muíños y Sindo Guinarte. El primero dejó Festas, Protección Civil y Bomberos, que asumió el segundo, para hacerse cargo de las competencias de Obras, Barrios y Relacións Veciñais, heredadas de Fernández.
Mercedes Rosón, quien ayer indicó que el Ayuntamiento está analizando jurídicamente el expediente relativo a ese alquiler y que a partir de ahí se verá si hay que tomar alguna decisión, sumó entonces a sus atribuciones la de Centros Socioculturales. Pero esa no le llegó heredada de Javier Fernández, sino por decisión previa del alcalde. Precisamente, la retirada del área de Centros Socioculturais a aquel fue lo que determinó su marcha del gobierno en noviembre.
Alfonso Rueda, al que ayer preguntaron, tras el Consello de la Xunta, por la nueva crisis de gobierno abierta en Santiago, apuntó que espera que esta no influya en los proyectos pendientes entre ambas administraciones. El presidente autonómico señaló que «non é un bo sinal» la forma en la que se gestionó el asunto que llevó a la dimisión de José Manuel Pichel e indicó que a él no le gustaría que pasara lo mismo en el Gobierno gallego. «Supoño que afectaría ao seu funcionamento», aunque insistió en que si afecta o no al ejecutivo compostelano debe decirlo su regidor, Xosé Sánchez Bugallo.
