Juan Carlos Pérez Varela, ortodoncista: «Está demostrado que mejorando la sonrisa también lo hace la respiración»

Quienes han acudido a Juan Carlos Pérez Varela afirman que es uno de los mejores ortodoncistas de España. Presidente de la Sociedad Española de Ortodoncia (SEDO), comanda también la Comisión de Especialidades, donde lucha por dignificar una profesión que ha vivido una auténtica revolución de la mano de las nuevas tecnologías.

—¿Cuáles son los retos a los que se enfrenta la ortodoncia?

—Muchas veces no se distingue entre ortodoncista y dentista, cuando en realidad la primera es una especialidad de la Odontología. Estamos luchando para que se incluya en el nuevo real decreto porque España es el último país de la Comunidad Económica Europea en la que no está reconocida. También tenemos el reto del control de los alineadores, que han revolucionado el sector y que muchas empresas, de manera indiscriminada, intentan venderlos directamente al paciente. Desde la SEDO defendemos que es muy importante que cualquier tratamiento sea planificado y controlado por un profesional cualificado. Por último, la tecnología 3D nos ha cambiado. Clásicamente se hacían unas impresiones con una pasta, pero ahora utilizamos una cámara intraoral. Hacemos una radiografía en 3D y unimos las imágenes. A partir de esto hacemos planificaciones más exactas, incluso con impresoras 3D estamos construyendo muchísimos aparatos. La inteligencia artificial y el 3D han revolucionado la medicina. Y nosotras la aplicamos desde la cirugía virtual en 3D, a la colocación de tornillos o a aparatos anclados en hueso... No es solo atender pacientes en el sillón, nos pasamos horas planificando delante del ordenador. El perfil de nuestra profesión ha cambiado. Desde SEDO estamos trabajando para dignificar la profesión, enviar un mensaje a la población de que siempre debe ser tratada por un profesional, y estamos dando la mejor formación a nuestros más de 3.000 miembros.

—El próximo año celebrarán en Santiago un congreso sobre alineadores.

—Me siento muy feliz de que venga a aquí. En el último, celebrado en Valencia, hubo 1.800 doctores, con lo que eso puede suponer para la economía de la ciudad y de Galicia. Queremos dar una imagen de Galicia de que no solamente es pulpo y playa, sino también tecnología e innovación, así como un lugar en el que hay buenos profesionales y grandes empresas.

—Sobre los alineadores, ahora en internet abundan anuncios de todo tipo, y baratos.

—Son productos sanitarios, y como tal, deben estar controlados. La Agencia Nacional del Medicamento está haciendo una gran labor en ese aspecto. Los alineadores comprados a través de internet pueden suponer un perjuicio para la salud bucodental del paciente.

—¿Se trata de algo estético, o va más allá?

—Está demostrando que mejorando la sonrisa también lo hace la respiración. La ortodoncia no es solamente estética, no solo alineamos dientes. Imagínate de la importancia de potenciar la anchura del maxilar, con lo que eso supone para la oclusión, el encaje de los dientes o incluso para la respiración de los niños. Aparte de tener una sonrisa bonita, te vas a cepillar mejor, tendrán menor tendencia al desgaste de los dientes y menos problemas de la articulación temporal o mandibular, que es la que une la mandíbula con el resto del cráneo. Recibimos durante la pandemia a un montón de pacientes por bruxismo, que es un cúmulo de circunstancias de estrés, mala oclusión o incluso factores genéticos, que llevan a tener dolores en la zona del oído y en el cuello.

—A los niños, ¿a qué edad se recomienda acudir a una primera consulta?

—Entre los cinco y los seis años es el momento ideal para prevenir problemas. Podemos detectar muchas malformaciones. Por ejemplo, si la mandíbula de abajo crece más que la de arriba se debe hacer un tratamiento entre los seis y los ocho, lo mismo que si no crece bien a lo ancho.

—¿Qué tal tenemos la boca?

—Cada vez estamos más preocupados de cuidar la boca e, indudablemente, muchos adultos quieren mejorar la estética de su sonrisa. También hay gente con problemas articulares y de desgaste por estrés que buscan soluciones. Nos encontramos a otro grupo, que respira mal y eso está muy unido a la posición de los huesos, en niños vemos que haciendo expansión del hueso de arriba respiran mucho mejor.

«Los alineadores van bien para todo, pero requieren la colaboración del paciente»

Para el doctor Pérez Varela, la ortodoncia va mucho más allá de lograr sonrisa bonitas. La salud del paciente también se puede atajar desde la especialidad.

—Se están logrando incluso avances contra la apnea del sueño.

—En pacientes adultos, que respiran muy mal y que su calidad de vida es muy baja, con tratamientos en los que se combinan ortodoncia y cirugía mejoramos muchísimo la respiración.

—Se publicitan muchos tratamientos mágicos, pero ¿cuánto tiempo se requiere en uno común de ortodoncia?

—Muchas veces lo más difícil no es alinear los dientes, es encajar los de arriba con los de abajo. Se puede hacer en seis u ocho meses, pero un tratamiento bien hecho, con los dientes con las inclinaciones adecuadas es difícil hacerlo en menos de diez, 11 o 12. Según el caso incluso se pueden necesitar dos años.

—¿En el congreso sobre alineadores qué temas se tratarán?

—Se debatirá sobre su uso, aplicado a la práctica clínica y combinado con la tecnología 3D. Se pretende demostrar que hoy en día se pueden utilizar para cualquier tipo de problema. En los últimos cinco años, la profesión ha dado un vuelco total.

—¿Cuándo se colocan brackets y cuándo los alineadores?

—Desde el punto de vista biomecánico hay cosas que uno hace mejor que el otro, y viceversa. La tendencia es hacer cada vez aparatos más estéticos. Los alineadores van bien para todo, pero requieren la colaboración del paciente, se los tiene que poner entre 20 y 22 horas al día para que funciones. Los brackets, los pegas y necesitan colaboración, pero con los alineadores si no colaboras, el tratamiento se estanca.

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