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El joven atacante marcó el primer gol blanquiazul esta temporada
08 sep 2022 . Actualizado a las 16:25 h.La temporada comenzó bien para el santiagués Darío Martínez Germil, aunque no para el Compostela. El joven atacante realizó una buena labor en El Requexón frente al Vetusta Real Oviedo en el estreno liguero del grupo primero de la Segunda RFEF. Darío fue el autor del primer gol blanquiazul en este curso, un tanto que no sirvió para puntuar.
El conjunto de la capital gallega se adelantó en el marcador y puso el duelo muy a su favor. Sin embargo, pese a llegar con ventaja al descanso, los de Fabiano Soares se vieron superados por el adversario en el segundo acto. El filial azulón le dio la vuelta a la tortilla y en el último minuto del tiempo reglamentario consiguió marcar el segundo gol con el que sumó los tres puntos. En el añadido ya nada pudo hacer el Compostela para recuperar oxígeno y lograr el empate al estar en inferioridad numérica por la expulsión de Martín.
Darío está contento con su actuación personal, pero sabe que de poco sirve marcar si al final no sumas los tres puntos: «En el estreno liguero tuve buenas sensaciones por el gol conseguido, pero malas por el resultado final. A nivel colectivo creo que estuvimos bien porque elaboramos buenas jugadas e hicimos cosas interesantes. De todos modos, considero que tenemos que mejorar ciertos aspectos que nos cuestan y que nos hacen ser menos competitivos. Estamos con muchas ganas de seguir trabajando para mejorar», reconoce el joven punta blanquiazul.
El jugador destaca que se adaptó perfectamente a su nuevo vestuario. «En general estamos muy contentos, con sensaciones muy buenas durante la pretemporada. Estoy feliz con los compañeros y con el trabajo que se está realizando. Estoy aquí en Santiago para crecer con el Compostela». Sin embargo, pide tiempo para que el equipo ofrezca su mejor cara: «Tenemos un equipo con muchas incorporaciones, con futbolistas que fueron llegando a lo largo de la pretemporada. En el Compos hay muchas novedades y en esta primera jornada afrontamos el debut con bajas importantes. No se puede conseguir todo en dos días. Todo esto requiere un proceso. Hay que tener plena confianza en el trabajo del entrenador y en los jugadores para poder luchar y conseguir los tres puntos cada semana».
Críticas
Una de las críticas del entrenador blanquiazul, Fabiano Soares, tras la derrota sufrida en tierras asturianas, se centró en el juego del equipo sin balón. El hispano brasileño exige mucha más atención a este aspecto del juego, pues sabe que con la pelota en los pies el Compostela sí puede y sabe hacer mucho daño. Sin balón es en donde se reflejaron mayores carencias en Oviedo. De la misma opinión es el atacante Darío Germil: «Yo soy el primero que quiero exigirme más, porque esta categoría así lo requiere. Aunque juegues bien el balón, luego no vale si no eres más competitivo en las disputas, en las presiones y en los repliegues. Eso penaliza mucho. Debemos darle una vuelta a esta situación. Debemos sacrificarnos todos para lograr los objetivos que persigue el club. Estamos trabajando en ello y poco a poco vamos a mejorar».
Entiende además el punta que la labor de marcar goles no solo es una cuestión de los delanteros. Por eso, señala que «en un equipo no pueden marcar solo dos o tres futbolistas. Eso es una labor de todo el equipo. Tenemos gente en la plantilla muy capacitada para hacer gol. Hay jugadores que crean mucho peligro arriba. También los de la segunda línea. El Compos tiene buenas llegadas al área y un montón de recursos. Todos podemos y debemos sumar. También a balón parado tenemos jugadores que van bien por arriba».
Olvidado ya el pasado reciente y pensando en el futuro inmediato, a Darío solo se le pasa por la cabeza la opción de sumar los tres puntos en San Lázaro frente al Burgos Promesas. El atacante explica que «el Compostela enfocará el duelo pensando claramente en sus cualidades porque da igual que esté enfrente un filial o un equipo más veterano. El Compos tiene nombre e historia y por eso vamos a jugar nuestro partido, intentado tener la posesión del balón para hacerle mucho daño al rival. Nos fijaremos en el contrario, pero lo más importante es hacer nuestro trabajo y hacer en el campo lo que sabemos».