El nuevo contrato para los comedores escolares de Santiago elevará hasta un 45 % el coste de las comidas

r.m. SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

PACO RODRÍGUEZ

El Concello preveía en marzo asumir la subida, que será mayor en los desayunos

31 jul 2022 . Actualizado a las 01:00 h.

El nuevo servicio de comedores elevará hasta prácticamente un 45 % el precio de la comida (se prevén servir 1.050 al día), aunque todavía será mayor el incremento en el desayuno (300), que subirá un 69 %. Ese es el aumento que prevé el pliego de condiciones para la adjudicación de esta prestación en una decena de colegios, aunque es posible que las ofertas atemperen algo la subida. De momento, y según el pliego, lo que se prevé es que los desayunos pasen de 1,94 euros a 3,279 (incluye la atención de madrugadores desde las 7.30 horas hasta el inicio de la actividad lectiva) y las comidas de 4,50 a 6,517, con el IVA incluido en ambos casos.

La intención del Concello es asumir el sobrecoste del servicio. Al menos, eso apuntaba, «a día de hoxe», el edil de Educación, Rubén Prol, en marzo pasado, cuando trascendió que la nueva concesión supondría importantes subidas, aunque entonces públicamente no se sabía todavía en qué medida se encarecería el servicio. El concejal estuvo ilocalizable ayer para confirmar si será así.

Las condiciones del nuevo convenio colectivo del sector y el alza de precios en la alimentación están, esencialmente, detrás de este incremento, según el Concello, que cuenta con que la nueva concesión empiece a funcionar en noviembre. Esa es la fecha que ayer adelantó el alcalde, lo que supondrá un retraso al menos de dos meses con respecto al inicio del nuevo curso.

El propio Xosé Sánchez Bugallo asumió ayer que el concurso debería haber salido al menos hace nueve meses y adujo complicaciones con los pliegos para justificar un retraso muy cuestionado desde la oposición y la Federación de ANPA de Santiago, muy crítica con la gestión de Prol, para el que han pedido la dimisión o el cese en varias ocasiones. De ese descontento de los padres se hizo eco de nuevo ayer Compostela Aberta (CA). De hecho, considera una burla hacia los progenitores que el Concello aprobase la licitación del pliego en Xunta de Goberno el pasado martes y no informase de ello con el resto de los asuntos que trató ese órgano, y se pregunta «que ten que ocultar o goberno». El alcalde adujo que el tema se trató en una junta extraordinaria posterior a su comparecencia pública para informar de los asuntos que trató la ordinaria y que los pliegos ya son públicos desde el jueves.

Pero CA afirma que el gobierno está actuando «con escurantismo para esconder a mala xestión no servizo», además de considerar esos pliegos una «afrenta» a las ANPA, cuyas demandas no han atendido, dice la edila María Rozas, quien afirma que «cada día hai máis motivos para pedir a dimisión de Rubén Prol, pero tamén para reclamar a responsabilidade de Bugallo, que mantén ao concelleiro no seu cargo e que está sendo cómplice necesario das súas desfeitas no departamento».

Bugallo invita a los padres a asumir el servicio

El alcalde insistió en que el Ayuntamiento hace «un enorme esforzo» para la prestación de un servicio que no es de competencia propia y se mostró totalmente abierto a ceder su gestión a las ANPA, como hacen las de Pío XII y Lamas de Abade, en el caso de que lo deseen. «Nós, absolutamente encantados», dijo, convencido, además, «de que o poderían facer mellor e máis barato que a administración pública».

Las empresas deberán ofertar al menos veinte menús distintos

El concurso, que sale por dos años, con un coste de 1,37 millones por curso, cubrirá el servicio de desayuno para el colegio Casas Novoa y ese mismo y el de comedor para el Raíña Fabiola, Fontiñas, Ramón Cabanillas, Roxos, Vite, Apóstolo Santiago, Monte dos Postes, Quiroga Palacios y Rodríguez Xixirei.

Las empresas habrán de ofertar al menos veinte menús para la comida, sin que se puedan repetir hasta haber servido los 19 restantes y sin coincidir el mismo menú en el mismo día de la semana, porque puede haber usuarios solo en determinados días. Tendrán que ofrecerse verduras de temporada al menos tres días a la semana y frutas, siempre frescas, cuatro veces. Asimismo, tendrá que haber pescado al menos dos días (uno azul y otro blanco). Para el desayuno se ofertarán como mínimo ocho menús. La cocina para elaborar la comida no podrá estar a más de 151 kilómetros del municipio. El plazo para presentar las ofertas se cierra el 31 de agosto, lo que critica CA, al coincidir con el mes «no que a maioría das empresas e a administración funcionan a medio gas».