El pleno demanda un párking para el Hospital Clínico de Santiago, aunque sin unanimidad

La reiterada demanda de un nuevo aparcamiento público para el Hospital Clínico llegó ayer al pleno de la corporación y provocó uno de los debates más acalorados de la sesión, aunque no suscitó una declaración unánime. El alcalde, Xosé Sánchez Bugallo (PSOE), que en los últimos meses ha hecho bandera de esa reclamación ante la Xunta, debió de entender que esa no es la vía, porque su grupo fue, precisamente, el que no dio oportunidad a la unanimidad.

Los socialistas optaron por la abstención frente a una oposición que respaldó en bloque la iniciativa con la que Compostela Aberta propuso al pleno instar al Ayuntamiento y a la Xunta a realizar las actuaciones precisas para que el convenio que han de suscribir ambas Administraciones para la ampliación del CHUS resuelva los problemas de accesibilidad peatonal y de aparcamiento. Y por precisas, CA entiende al menos la realización de un estudio de la movilidad y accesibilidad peatonal universal y la dotación de un nuevo aparcamiento público.

Pese a no apoyarla explícitamente —«non votaremos a favor de algo que nos parece demagoxia»—, el regidor hará llegar a la Xunta ese acuerdo «como unha reclamación máis de que fagan o aparcadoiro», pese a que la moción de CA no recoge que sea la Administración gallega la que tenga que asumirlo. «E deberían dicilo», apostilló el regidor después de escuchar a una oposición muy crítica (en este caso CA y BNG) por no haber hecho valer esa exigencia en las negociaciones con la Xunta, e incluso antes, para la prevista ampliación del Clínico, sobre todo cuando la no implicación en este caso del Sergas supone un «agravio comparativo», coincidieron Jorge Duarte (CA) y Goretti Sanmartín (BNG), con respecto a los hospitales de A Coruña y Pontevedra. Un agravio «reforzado» por el alcalde, según Duarte, cuando dio por hecho que había que elegir entre mejorar la atención sanitaria o la oferta de aparcamiento, como si fuesen incompatibles, defendió junto con Sanmartín, quien acusó a Bugallo de no «plantarlle cara» entonces a la Xunta. La nacionalista demandó ahora soluciones, al igual que el PP, que se sumó a la iniciativa de CA cuestionando la capacidad de Bugallo para colaborar con la Administración gallega, en línea con el discurso que viene manteniendo su líder local, Borja Verea. «Non poderiamos estar máis de acordo» con esa propuesta, dijo Beatriz Cigarrán, quien, sin llegar a hablar de discriminación, sí apuntó la diferencia con otras ciudades después de acusar al regidor de no haber sido capaz en tres años de entenderse con la Xunta, cuando «os cidadáns precisan solucións» ante una dotación de estacionamiento «tan insuficiente».

«Acabo de asistir a un espectáculo de demagoxia impresionante», le respondió el alcalde, quien apuntó que las «competencias e responsabilidades» en esa materia son de la Xunta y que Raxoi ya aportó las 700 plazas que suman el párking subterráneo y el de Santa Marta, «todas con este alcalde e cero con CA e o PP». Bugallo apuntó que con la figura escogida por la Xunta para tramitar la ampliación del CHUS, el proyecto hubiese quedado bloqueado si se condicionase a la construcción de un párking y dijo que el convenio que amparará esa ampliación recogerá que se pone a disposición de la Xunta una parcela para un párking pero que «non é esixible ao Concello que o constrúa».

Prol no convence a la oposición con las explicaciones por el malestar por la conciliación

Consciente del malestar que generó en la ciudad la organización del programa de conciliación de verano, el concejal de Educación, Rubén Prol, compareció ayer por iniciativa propia en el pleno. Lo hizo para dar cuenta del esfuerzo municipal por sacar la mayor oferta «da historia deste Concello», con la ampliación del servicio, además, al mes de agosto, aunque no llegó a entrar en el fondo de ese malestar: la tardía resolución de las peticiones de plaza para los CEIP. Las listas no se conocieron hasta dos días antes de que concluyese el curso escolar, lo que mantuvo a muchas familias con la incógnita hasta el último momento de si podrían conciliar, amén del problema que se le planteó a esas alturas a las que quedaron fuera.

Pero sí entró la oposición. «Su falta de atención y diligencia ha causado problemas en la ciudad», le dijo del portavoz del PP, José Antonio Constenla, quien invitó a Prol a hacer «examen de conciencia y propósito de enmienda», mientras que María Rozas (CA) le reprochó que «viñese a dar explicacións que non son tales cando as Anpas están pedindo o seu cese». La edila rechazó que los plazos de resolución de este año estuviesen en la órbita de los de otros mandatos, como había apuntado el edil en explicaciones previas al pleno. Eso sí, le reconoció el incremento de plazas, aunque «non nas dimensións que vostede fala». Desde el BNG, Goretti Sanmartín insistió en que Ames y Brión tienen mejores ratios en la oferta de plazas, aunque Prol apuntó que no es así en el caso de Brión si se ciñe a la población en edad de disfrutar de esos servicios, y puso en valor que en Santiago se oferte madrugadores y comedor, «cando en moitas cidades falan de táper».

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