Marzo y abril
El drama llegó en los meses de marzo y abril. El Compos estuvo ocho semanas consecutivos sin saborear las mieles del triunfo. Cuatro derrotas y cuatro empates. Solo cuatro puntos de los 24 posibles. En esta fase de desconcierto, Rodri hizo un amago de arrojar la toalla. En el club, sobre todo el director deportivo Manuel Castiñeiras, le convencieron para seguir hasta el final. Se mantuvo en el cargo y hasta el último instante, aunque era preciso un milagro, el Compos tuvo remotas opciones de clasificarse para el play off.
El Compos no encontró el gol en el nuevo año. Por el contrario, empezó a recibir con demasiada facilidad. La fuerza defensiva del primer tramo del campeonato no apareció en el 2022, con lo que el equipo se mostró más débil y con menores garantías de éxito. El juego no enamoró a la hinchada y los adversarios se encontraron con un Compos más flojo. La segunda vuelta condenó a Rodri. Mató al Compos. Por eso, para el próximo curso habrá un nuevo proyecto y un nuevo inquilino en el banquillo.
