Los vecinos de San Lourenzo, en Santiago, esperan erradicar el punto de consumo de drogas

Margarita Mosteiro Miguel
Marga Mosteiro SANTIAGO / LA VOZSANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

Urbaser retiró gran cantidad de jeringuillas, pero ya pueden verse más

26 ene 2022 . Actualizado a las 23:10 h.

Tras la limpieza de caminos y apertura de nuevas calles en el Campus Vida y A Choupana, los vecinos de San Lourenzo comenzaron a detectar un incremento de presencia de individuos que buscan sitios «discretos» para consumir drogas en el barrio. Durante varias semanas, un número indeterminado de estas personas se dio cita en una casa abandonada y tapiada situada en una zona verde próxima al paseo del Sarela. La casa tiene una zona protegida de la lluvia y el frío, lo que propicia su uso para el consumo de drogas sin llamar la atención.

Desde la asociación de vecinos Río Sarela apuntaron que, según pudieron constatar, los que se dan cita en esa casa son personas que adquieren la droga en alguno de los puntos de venta de A Choupana, en las inmediaciones de San Ignacio de Loyola. Antes consumían en un zona de vegetación, libre de miradas curiosas, en la entrada de la rúa San Lourenzo, en el campus. Cuando este espacio se limpió y se abrió una calle, tuvieron que buscar nuevos puntos tranquilos cerca del lugar de compra, tanto en Santa Marta como en San Lourenzo.

La zona afectada, además de ser frecuentada por drogadictos, también es un lugar habitual de los paseos de los vecinos. De ahí que desde la Asociación de Veciños Río Sarela se pidiera al Concello su intervención para eliminar el punto de consumo de drogas. Hace unos días, concretamente el pasado 12 de enero, un operario de Urbaser retiró toda la basura amontonada, en la que había gran cantidad de jeringuillas, papeles, plásticos y otros objetos habitualmente empleados en el consumo de drogas. Pero en la jornada de ayer podían verse nuevamente, aunque en menor cantidad, jeringuillas y otros objetos, entre ellos envases de metadona, pastillas y suero.

Los vecinos quieren que el trabajo de limpieza no se limite a un solo día y que los servicios municipales de Limpeza y Seguridade estén atentos, con el fin de garantizar que se erradica definitivamente el foco de consumo.

Jon Brokenbrow, presidente de la asociación, dice que estará atento, por si fuera necesario volver a avisar a la empresa de limpieza. El portavoz vecinal afirma que el barrio de San Lourenzo «ya no tiene nada que ver con el de los años 90, cuando había puntos de venta y consumo de droga». De ahí que se insista en mantener un control sobre la zona, para que «no vuelvan aquellos años», especialmente en un momento en el que en el barrio se están desarrollando proyectos urbanísticos de calidad.