Lara Marín, nutricionista infantil y enfermera: «Para una buena alimentación de los hijos, los padres deben dar ejemplo»

«Los seis primeros años de vida marcan la salud futura de la persona. Y para hablar de la alimentación del niño hay que hablar de la alimentación de su familia», afirma Lara Marín, nutricionista infantil y enfermera. Consulta en Madrid y tiene experiencia en colegios. Esta tarde interviene en las cuartas jornadas de educación infantil del centro Dolores Ramos-Manuel Peleteiro.

—«Alimentar a nuestros hijos sin morir en el intento», ¿por qué titula así su charla?

—Porque vamos a hablar de las dificultades que encontramos todas las familias, y me incluyo, y ver cómo responder. A veces supone pequeños esfuerzos.

—¿A qué se refiere?

—Para una buena alimentación de los hijos, los padres deben dar ejemplo. No tienen que plantearse solo cambiarles la merienda, sino cambiar cómo se alimentan ellos, ahí es donde empieza todo.

—¿Qué abordará en esta charla, orientada a familias y docentes?

—Quiero que quienes asistan salgan con un mínimo de autocrítica y autoanálisis y dispuestos a actuar. Por ejemplo, para hacer recetas que sean sencillas, pero que les gusten a los niños. Un niño que lleva años comiendo yogures de sabores no va a cambiar de repente; pero se puede ir poco a poco, para acostumbrar su paladar a sabores más naturales.

—¿Cómo se les acostumbra a verduras y hortalizas?

—Veo continuamente en la consulta problemas de rechazo a esos alimentos. Hay que camuflarlos, en pasteles con pescado, carne, huevo y además verdura; o albóndigas o hamburguesas con verdura dentro. Hay además un rechazo natural a los sabores amargos, por eso hay que ir poco a poco y, si hay rechazo, no tirar la toalla, sino volver a intentarlo.

—¿Cuál es la mayor dificultad?

—Que hemos normalizado productos que no son alimentos. Además, hay mucha oferta de franquicias de comida rápida, y de opciones de ultraprocesados en los supermercados, y hay que intentar que en casa entren lo mínimo; y en los colegios, nada.

—¿Cuál es su principal recomendación para las familias?

—Que asuman que la buena alimentación y el movimiento son claves de la salud futura de sus hijos, y que los promuevan.

—¿Y cómo reaccionan padres y madres cuando la escuchan?

—Son dificultades comunes a todos, y también me incluyo, porque soy madre de dos hijos; por eso me ven a su misma altura y reaccionan bien. Porque tener hijos ayuda a entender los problemas. Se trata de hacer cambios pequeños y coherentes; porque si propones cambios grandes no se identifican y van a durar poco. E interesa que se mantengan.

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