El Concello de Santiago descarta otra vez la cabalgata de Nadal, pero habrá recepción real

r. martínez SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

Sandra Alonso

Quiere evitar aglomeraciones de niños, aunque valora recuperar la fiesta de fin de año

03 oct 2021 . Actualizado a las 00:59 h.

Santiago se quedará de nuevo sin cabalgata de Reyes. Al menos, esa es la previsión a día de hoy y mucho tendrían que cambiar las cosas para que el Ayuntamiento lo reconsiderase, pese a la relajación de restricciones tanto en espacios abiertos como cerrados que se están determinando estos días. Aunque esa es una actividad que discurre totalmente al aire libre, también llama a importantes aglomeraciones. Aglomeraciones sobre todo de pequeños, un sector de la población que no está vacunado y que en las aulas sigue sometido a protocolos anticovid. El concejal de Festas, Gonzalo Muíños, no ve sentido que mientras primen esas cautelas en el entorno natural de los escolares el Concello organice un evento que aglutine a miles de ellos en la calle.

A expensas de cómo pueda evolucionar la situación, el responsable municipal de festejos apunta que ahora mismo la línea de trabajo es que no habrá cabalgata. El edil apela a la coherencia y la prudencia: «Os reis realmente son para os nenos pequenos e se están con restricións nos colexios non imos ser nós quen promova que estean todos pegados e mesturados na rúa». Y no parece que esa previsión vaya a cambiar, salvo que haya un giro en las cortapisas que ha impuesto el covid en las relaciones sociales capaz de dar la vuelta a las circunstancias expresas de la población escolar.

Los pequeños no se quedarán, sin embargo, sin la presencia regia de los Magos de Oriente. Melchor, Gaspar y Baltasar llegarán igualmente a la ciudad, como siempre, y harán una parada con tiempo suficiente para que los niños puedan visitarlos. Se dejarán ver de nuevo en la iglesia de Bonaval, adonde el año pasado trasladaron por primera vez su tradicional recepción de Raxoi. Las medidas anticovid obligaron a buscar un emplazamiento alternativo que facilitase la recepción a los más pequeños, sujeta entonces a estrictas medidas de seguridad sanitaria. «A localización gustou moito», dice Muíños.

«Normalidade controlada»

Y allí volverán, aunque este año se flexibilizarán las medidas, en línea con la moderación de las restricciones que está llegando a otros ámbitos. Para asistir habrá que seguir las recomendaciones sanitarias y ceñirse a los aforos del momento, pero los grupos familiares podrán acceder ya juntos. El pasado año solo un progenitor podía acompañar a los niños.

Lo que sí quiere recuperar ya el Ayuntamiento es la fiesta con la que en las dos últimas décadas la ciudad despedía el año, salvo las dos que el covid dejó para el olvido. La evolución de la pandemia, el nivel de vacunación y la relajación de las medidas anticovid permiten pensar en su programación ya, aunque sin perder de vista las cautelas a que obligue todavía la situación en cuanto a aforo y medidas de protección personal. «Estamos valorando o tema de fin de ano», afirma Gonzalo Muíños, «para ver se se pode recuperar a festa co cotillón», porque «hai que ir volvendo á normalidade controlada pouco a pouco».

Todavía quedan prácticamente tres meses para entonces, pero hay que comenzar a tomar decisiones para programar y disponer, como la organización de las demás actividades navideñas. Entre ellas, los mercados que contribuyeron a mantener, junto con la iluminación, el ambiente navideño el año pasado. Los mercados de Nadal y de A Estrela volverán, el último además para celebrar su décimo aniversario, lo que seguramente se refleje de alguna forma en su programación.

En todo caso, ya sean estas citas tradicionales o cualquier otra iniciativa que complemente el programa municipal, se organizarán en función de los aforos, si los sigue habiendo entonces, y las medidas de seguridad que imperen en el momento.

La licitación de la iluminación por dos años y 500.000 euros ya está en marcha

El único elemento de la programación navideña que no está sujeto a consideraciones que pueda condicionar la pandemia es la iluminación. Y su contratación ya está en marcha. El Ayuntamiento se ha dado prisa este año y el miércoles de esta misma semana concluía el plazo para presentar ofertas. Todavía llevará semanas resolver el concurso, pero si no surgen problemas estará con tiempo más que suficiente para que el alumbrado se encienda el 2 de diciembre, antes del puente de la Constitución.

El concurso salió por dos años (2021 y 2022) y un precio de prácticamente medio millón de euros (499.883 euros) entre ambos. El Ayuntamiento busca una iluminación que concuerde con la personalidad de la ciudad, según apunta en un pliego que asegura luminarias en buena parte de las calles y plazas del centro, pero también en barrios y al menos en un punto señalado en cada una de las parroquias, como se viene haciendo en los últimos años. Un gran árbol de leds seguirá presidiendo la Praza do Obradoiro, junto con la iluminación de la fachada del pazo de Raxoi.