La movida del segundo jueves del curso dejó denuncias por 20 fiestas en pisos y más botellones

Margarita Mosteiro Miguel
marga mosteiro SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

XOAN A. SOLER

La policía disolvió concentraciones en Curros Enríquez y Alfredo Brañas

18 sep 2021 . Actualizado a las 22:24 h.

La segunda noche del curso universitario en Santiago volvió a resultar agitada. Sin llegar al volumen de incidencias registrado en la semana anterior, al menos en cuanto a las más de 60 denuncias que impuso entonces la Policía Local, este jueves también fue ajetreado para los agentes municipales, que tuvieron que multiplicarse para desactivar numerosos frentes: una veintena de fiestas en pisos, botellones en diversos puntos de la ciudad y las concentraciones de jóvenes que ya se han hecho habituales en las últimas semanas en Curros Enríquez -ante la discoteca Ruta, la única abierta en Santiago-, a las que se sumaron dos más en Alfredo Brañas y en la Praza Roxa, esta ultima con un elevado número de personas reunidas a las 4.00 de la madrugada. Todo esto salpicado con incidencias de menor calado, pero que dieron lugar a la identificación de varias personas por parte de la Policía Local.

Además de acudir a veinte pisos para poner fin a las fiestas que no dejaban descansar a los vecinos, los agentes tramitaron siete denuncias por orinar en la calle y ocho por consumo de alcohol en la vía pública. El dispositivo especial que disolvió las concentraciones en el Ensanche y en Curros Enríquez, con la colaboración de la Policía Nacional, también intervino en el casco histórico, donde igualmente se registraron aglomeraciones junto a locales de hostelería nocturna que no podían dejar entrar a más personas debido a las limitaciones de aforo al 50 %. La Policía Local fue alertada de la celebración de un botellón -a las 19.11 horas- que reunía a medio centenar de jóvenes en la rúa Alexandre Bóveda, en el barrio de Vite, y concretamente en una zona próxima al Campus Norte. Los participantes escaparon corriendo al ver llegar a los coches patrulla. También fue necesaria la intervención policial para poner fin a botellones de menor tamaño en el parque de Belvís -a la 1.45 horas-, en la avenida de Coímbra -a la 1.15- y en la plaza Marcial Villamor (Sar) -a las 5.35-, donde fueron identificadas ocho personas. 

«Problema complexo» 

Ante este parte de incidencias, el alcalde de Santiago, Xosé Sánchez Bugallo, subrayó que la situación no le agrada. «O feito de dispoñer de máis liberdade, nos obriga a actuar máis responsablemente», apuntó en referencia a un inicio de curso que llega en una coyuntura más favorable por el aumento de la población vacunada y por la reducción de las restricciones frente a la pandemia. En este punto, Bugallo advirtió que las concentraciones que se producen en Curros Enríquez «están ocasionando moitísimas molestias aos veciños». Asumió, en ese sentido, que esas situaciones le generan al Concello «un problema de complexa solución», ante el que expresó su deseo de que se vaya encauzando.