La adjudicataria retirará el jardín del cruce del Parlamento para que buses y camiones puedan hacer el giro
07 sep 2021 . Actualizado a las 05:00 h.La rúa do Hórreo estará en obras durante cinco meses como máximo, si se ajustan al plazo de ejecución, y tres como mínimo, si se cumple el deseo formulado por Bugallo. A media mañana de ayer, la calle pasó de cuatro carriles de circulación a dos en el tramo comprendido entre San Pedro de Mezonzo y la rotonda del Parlamento. En esta primera fase, los coches circularán en ambos sentidos, utilizando los carriles de bajada, mientras los trabajos se concentrarán en los de subida. Cuando estos estén acondicionados, se abrirán al tráfico y entonces se cortarán los de bajada para su remodelación. La obra no incluye cambios de servicios ni ningún trabajo en el subsuelo, por lo que el concejal del área, Javier Fernández, apunta que a priori la dificultad es menor. Pese a todo, prefiere ceñirse al plazo de ejecución fijado en la contratación, aunque el alcalde insiste en que la remodelación deberá estar rematada en tres meses.
Los primeros contratiempos ya surgieron ayer. Aunque sobre el papel todo estaba perfectamente planificado, una vez que los operarios llegaron al terreno fue necesario hacer varias modificaciones con el objetivo minimizar los efectos sobre el tráfico. De ahí que, durante las primeras horas, estuvieran varios efectivos de la policía local para asesorar en materia de tráfico.
Entre esos cambios destacan, por ejemplo, la retirada del jardín situado en la medianera del giro hacia el Parlamento, con el fin de ampliar la caja de la calzada y facilitar los giros de camiones y autobuses. Y cuando terminen de retirar el jardín aún habrá que hormigonar ese espacio, lo que aún llevará unos días. Los operarios de la adjudicataria también se percataron de que la parada de autobuses situada antes de Santiago León de Caracas es inviable, por lo que deberá ser trasladada unos metros más abajo.
En el trabajo previo se decidió habilitar una rotonda en el cruce hacia San Pedro de Mezonzo para los coches que circulan en sentido ascendente. De esta forma, se alivia la carga sobre el tráfico de bajada y se facilita el acceso a los usuarios de los colegios de este ámbito y a quienes acudan a esta parte del Ensanche.
Los cambios generan dudas en los usuarios de buses metropolitanos
En las primeras horas de la mañana, cuando se estaban realizando los preparativos para el arranque físico de las obras, algunas personas esperaban sus buses en la parada del transporte metropolitano de O Hórreo. Allí no había ningún cartel informando del cambio de ubicación de la parada. La falta de información fue suplida por el boca a boca de otros viandantes, que advirtieron de que los metropolitanos volvía a salir desde A Rosa. Todas las líneas del transporte metropolitano, salvo al que tiene por destino Negreira, partirán desde esa calle durante el tiempo que duren las obras en la rúa do Hórreo. La excepción, según aclararon desde la empresa municipal de Transportes Tussa, es el bus de Negreira, que tendrá su llegada y salida en la nueva estación. Los cambios se comunicaron a las empresas hace días y los conductores fueron informando a los usuarios en los autobuses.
Algo más de medio millón de euros para acercar al Ensanche la nueva estación intermodal
La obra del Hórreo se adjudicó a Eulogio Viñal por 505.715 euros. El proyecto contempla dos ámbitos: entre Fernando III O Santo y Santiago León de Caracas se creará un espacio para el transporte público metropolitano y urbano, con dos carriles de calzada para su uso exclusivo. El carril junto a la acera facilitará la parada de hasta ocho autobuses del metropolitano y cuatro del urbano. El carril colindante será de circulación de los buses. En el margen contrario se establecerán otros dos carriles de uso general, con una parada entre Santiago León de Caracas y San Pedro de Mezonzo. En el tramo entre Santiago León de Caracas y la avenida de Lugo se proyecta una plaza de acogida. El espacio será de plataforma única y con una altura superior a la actual para eliminar la diferencia con la pasarela de la intermodal.