«Se pos o traxe, vanche pedir fotos coma se foses unha postal vivente»

óscar lópez / i. c. SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

Santiago celebró ayer el Día do Traxe Galego con pasacalles en el casco histórico y la exhibición y concurso en A Quintana

29 jul 2021 . Actualizado a las 00:27 h.

El viandante despistado que recorriese ayer Santiago podría creerse víctima de un súbito viaje en el tiempo al ver grupos de personas ataviadas con el traje tradicional gallego tomando café. Se trataba de los instantes previos a una nueva edición del Día do Traxe Galego, que se celebró con el tradicional pasacalles, dividido por motivos sanitarios en dos grupos que partían de Cervantes y la Alameda.

El desfile de ambas comitivas, acompañadas por los gaiteiros de O Son do Viso y Aires de Compostela, atrajo la atención de propios y extraños. A su paso por las calles del casco histórico, vecinos y turistas, agolpados en los laterales formando un pasillo, aplaudieron las piezas de los músicos e inmortalizaron el momento con sus teléfonos móviles, que formaban una marabunta sobre las cabezas de la multitud.

No faltó tampoco quien quiso retratarse con los participantes. Paula Romero, Paula Noia y Andrea Noia, que no pudieron desfilar por las limitaciones pero se vistieron igualmente con ropas tradicionales, atendieron amablemente numerosas solicitudes. «En Santiago, se pos o traxe galego, sempre hai quen che pide fotos para levalas de recordo. Para eles somos unha postal vivente», afirma Andrea.

Hay también quien lleva toda la vida participando en el Día do Traxe, como Manuel Liste, miembro de O Son do Viso. «Teño 24 anos, empecei a tocar o tambor con catro e con cinco xa vin por primeira vez, así que levo vindo dezanove anos», explica. La continuidad de la celebración está asegurada con los más jóvenes, niños de corta edad, como Manuel en sus inicios, que desfilan junto a sus padres o abuelos y despiertan la simpatía de todo el mundo, arrancando comentarios como «¡Mira qué pequeñito y ya toca el tambor!».

Al final del recorrido, junto a la iglesia de San Paio de Antealtares, ambos grupos confluyeron y las gaitas se callaron para que jóvenes y mayores recordasen con una misa a los que abrieron camino, los socios ya difuntos de la Asociación do Traxe Galego. Por la tarde, los desfiles del concurso fueron seguidos con aforo completo en A Quintana.