Los usuarios piden que la subida del bus urbano en Santiago lleve a un mejor servicio

LUCÍA ORTIGUEIRA / S. L. SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

CATUXA PRIETO

Los aforos y la escasa frecuencia de algunas líneas centran las quejas de los viajeros

08 jul 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Son muchas las personas que, con mayor o menor asiduidad, hacen uso del servicio de autobuses urbanos de Santiago. La subida de precios prevista para la nueva concesión es motivo de preocupación para la mayoría, pues supone un cambio inesperado y que ataca directamente donde más duele, el bolsillo. El encarecimiento del billete ordinario puede rondar el 25 % y los pensionistas verían limitado el acceso gratuito al servicio.

Aunque algunos entienden que el incremento puede ser necesario y que acabaría llegando tarde o temprano, otros no ven justificado pagar más. Es el caso de Marcos Varela, que espera por la línea 1 frente a la escuela de arte Mestre Mateo. Sin embargo, otra joven, Rut, que aguarda por el bus en la marquesina situada al lado de la intermodal, cree que la subida «non é desatinada porque en Santiago págase menos polo transporte urbano que noutras cidades».

Tampoco un grupo de chicas que esperan en la rúa da Senra están contentas con las futuras tarifas. Alicia Viturro argumenta que suele hacer uso de la línea 4 para ir a As Cancelas, por lo que la subida del precio del billete le afecta «bastante». Y Alba Fernández, que aguarda en la parada de la Praza de Galicia, sostiene que el aumento le parecería aceptable si viniese acompañado de «unha maior calidade no servizo de autobús». A su juicio, la gestión del transporte urbano deja mucho que desear, «e sobre todo durante a pandemia, cando era máis necesario un control nos aforos e te atopabas con buses cheos de xente, en moitos casos coa máscara por debaixo do nariz». Alicia pide un aumento de frecuencias para evitar estas aglomeraciones. Además, se queja de que no haya descuentos para universitarios como los que disfrutan los menores de 18 años o los de menos de 21 en el transporte metropolitano, porque utiliza el bus para ir al campus y «é un gasto».

También en la Praza de Galicia, una mujer que espera la línea 5 comenta que «no estaría mal que aumentase el número de buses, que si pierdes uno tienes que esperar mucho». A pocos metros, Victoria Iglesias, que usa el bono para pensionistas, alega que no suele coger el bus, pero «para los que lo usan siempre las nuevas tarifas serán un problema».

«Tendré que usar menos el autobús»

Con su bono de pensionista, Teresa suele utilizar los urbanos para desplazamientos esenciales, pero de vez en cuando aprovecha para despejarse y dar algún paseo, sobre todo cuando llueve. Las nuevas tarifas le impedirán esto último, porque con un alquiler a sus cuestas no podrá permitírselo.

«Deberían agilizar algo los trayectos»

Ángeles acostumbra a utilizar varias líneas de bus y califica negativamente la subida de precios porque desestabiliza la economía familiar. También se queja de las frecuencias, dice que son pocas. Cree que deberían o bien aumentarlas o al menos conseguir que los trayectos sean más cortos.

«Hai que cubrir os gastos do servizo»

Mateo Delgado, que viaja en bus con bastante frecuencia, es consciente de que existen una serie de gastos asociados al buen funcionamiento del transporte, que guste o no acaban por repercutir en el usuario. Comenta que seguirá haciendo uso el servicio como siempre porque para él es esencial.

El alcalde espera que las ofertas del concurso permitan modular las subidas

 

 

El alcalde asumió ayer que las mejoras «cualitativas e cuantitativas» de la nueva concesión del transporte supondrán un incremento notable de sus costes y que eso tendrá repercusión en las tarifas, aunque también observa que el proceso de licitación podría modular la subida de estas. El estudio de viabilidad encargado para abrir el concurso habla de una subida del 25 % en el billete ordinario (de 1 a 1,25 euros) y superiores para los bonos, pero «espero que a competencia do mercado» en el proceso de licitación «permita que esa previsión poida ser mellorada», dijo ayer Sánchez Bugallo en el programa Voces de Compostela, de Radio Voz, porque si hay rebajas en los costes generales podrían «reflectirse» en las tarifas.

Ese estudio apuesta también por dejar la gratuidad total de los jubilados en solo 100 viajes y que paguen 0,50 euros de ahí en adelante. «Xa veremos como queda ao final», porque esa será «unha cuestión de prioridades que haberá que ver no seu momento», aunque «o máis probable» es que los casos de gratuidad se vinculen a la renta. El alcalde apunta que cuando se implantó esa gratuidad había 1.800 bonobuses de pensionistas y «hoxe son case 20.000».