La parcela del Peleteiro, en Santiago, llevará un centro de día, pero aún no hay consenso sobre la orientación de la plaza

r. m. SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

XOAN A. SOLER

El PSOE plantea una alternativa que tampoco convence a los colectivos comerciales y vecinales

04 jun 2021 . Actualizado a las 14:39 h.

La parcela del antiguo colegio Peleteiro albergará un centro de día para el Ensanche. Es una de las demandas de la oposición y de los colectivos que forman parte de la comisión municipal mixta para decidir el futuro de esa finca y que se reunió ayer en el Concello. Las posiciones sobre la orientación de la plaza pública de 1.400 metros cuadrados que la propiedad ha de ceder para el desarrollo del suelo siguen enfrentadas, pero algo ha salido claro de esa reunión, la dotación de ese centro de día dentro de los otros 900 metros cuadrados construidos que también ha de aportar la propiedad a la Administración local.

El gobierno local no rechazó en ningún momento la instalación de ese servicio en la parcela, pero tampoco se había comprometido abiertamente con él, lo que sí hizo en la reunión de ayer, de la que salió el compromiso de todos los grupos con ese centro. Más difícil parece, de momento, el acercamiento sobre el reparto de los volúmenes en la parcela. La totalidad de los colectivos que participan en esa comisión rechazan el proyecto acordado entre el Concello y la propiedad, que abre la plaza hacia San Pedro de Mezonzo y que conecta con República Arxentina a través de un pasaje de 12 metros de ancho con edificaciones por encima.

Comercio y vecinos mayoritariamente quieren que la plaza se abra a República Arxentina, una calle más comercial y que de la otra forma perdería la luminosidad que le aporta ahora el área despejada del patio del antiguo colegio. Por contra, afirman que la pérdida de luz no afectaría a San Pedro de Mezonzo, hacia donde da ya la fachada principal del antiguo centro educativo y donde la iglesia de San Fernando y su casa parroquial garantizan una esquina de altura más contenida al otro lado. El gobierno de Bugallo dice que la orientación a San Pedro de Mezonzo (al sur) es la que defienden los técnicos.

El regidor abrió una posibilidad intermedia para el acceso a la plaza. La de que la conexión de República Arxentina no sea a través de un pasaje cubierto, sino libre de edificaciones encima y de 13,5 metros de ancho. El Concello ya lo consultó con la empresa, «coa que estamos traballando para incorporar ao proxecto as inquedanzas que manifesta a veciñanza», dice la edila de Urbanismo, Mercedes Rosón.

¿Por qué no a la inversa?

Pero esa concesión no parece suficiente. ¿Por qué no se plantea a la inversa -la plaza abierta a República Arxentina y el pasaje, incluso sin edificación superior, en San Pedro de Mezonzo-?, se pregunta José Antonio Seijas, presidente de Comercio Punto Compostela, quien el lunes expuso las demandas de los colectivos de comerciantes y el vecinal ante el pleno.

La solución formulada ayer no resuelve sus demandas y la cuestión ahora es qué hará el gobierno, que tiene previsto llevar al pleno de este mes la propuesta de evaluación ambiental vinculada al desarrollo de la zona. Por un lado tiene un sector social contrariado con su proyecto. Por otro, una oposición a la que necesita (al menos al PP o a CA) con posturas muy distantes, ya sea por la orientación de la plaza (CA) o por el procedimiento consultivo y el debate de ideas programáticas para la parcela. PP y BNG defienden que se debe escuchar a más colectivos y vecinos afectados o con intereses por el desarrollo de la parcela y abrirse a ver más alternativas que «a única» que el PSOE ha puesto sobre la mesa.

En lo que sí coinciden todos es en que el proyecto debe salir adelante ya. Y eso requiere consenso. Sin el suficiente para garantizar mayoría absoluta, la proyección de la zona deberá esperar al menos otro par de años. Pero el consenso no depende solo de la corporación. La propiedad tiene que aceptar también cualquier propuesta que se formule.