Otro ejercicio de supervivencia del Obradoiro en la temporada más difícil y atípica

KOKE RAMA

SANTIAGO

XOAN A. SOLER

El conjunto compostelano vuelve a cumplir los objetivos en una de las mejores ligas del mundo

25 may 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Un año más, y ya van diez temporadas, el Obradoiro cumplió el objetivo de la permanencia en la Liga Endesa. Supervivientes en una isla de ciclogénesis y dificultades continuas. Es nuestro título cada temporada, el gran objetivo, ya que permanecer en una de las dos o tres mejores ligas de baloncesto del mundo, en una pequeña ciudad que no llega a los cien mil habitantes, tiene un enorme mérito.

FICHAJES CON PROYECCIÓN

1 Con uno de los presupuestos más bajos de la ACB, temporada tras temporada, cada año se sacan conejos de la chistera, que se transforman en jugadores con proyección, talento y futuro a los que hay que involucrar en el ADN Obradoiro. Los magos de esta función que cada año hacen disfrutar a la afición y a la ciudad de un baloncesto de alto nivel son toda la gente que trabaja en el club y en sus distintas parcelas. Desde el director deportivo, que cada año se supera, a un cuerpo técnico que moldea todo el talento que ponen a su disposición y que hace un trabajo excepcional temporada tras temporada. Pasando por una junta directiva muy implicada y una hinchada que nunca defrauda.

MUCHAS ADVERSIDADES DURANTE EL CURSO

2 La temporada 20/21 será recordada como una de las más difíciles y complicadas a todos los niveles. Un largo año en el que se han ido superando todo tipo de adversidades, como la falta de ingresos, la ausencia de público en las gradas, las lesiones inherentes a cualquier deporte y la salud mermada durante casi un mes por culpa del maldito coronavirus. Una temporada que empezó muy ilusionante y se fue diluyendo conforme aumentaban los problemas. Muchos partidos perdidos en mitad de curso, que hicieron temer lo peor.

EL EQUIPO SE RECOMPUSO

3 A pesar de todos los contratiempos, el equipo se recompuso. A falta de diez partidos empezó a notarse el cambio de tendencia. El trabajo realizado, no cabe la más mínima duda, se plasmó en la pista. Los jugadores trabajaron y creyeron, se implicaron en pos del objetivo, sacando todo su potencial al servicio del equipo.

ROBERTSON Y ENOCH, SORPRESAS AGRADABLES

4 Analizando el comportamiento y rendimiento de todos los integrantes de la plantilla, debo hablar de dos grandes sorpresas, muy agradables en mi opinión. El primero, Kassius Robertson, un jugador que ha sido un referente en el juego ofensivo, capaz de generarse sus propios tiros, con lo que eso conlleva a la hora de desatascar situaciones comprometidas. El otro ha sido Steven Enoch. Su comienzo de temporada, a la sombra de Laurynas Birutis, no hacía prever todo el potencial que atesora. Un cuatro y medio con un físico espectacular y una manita nada desdeñable.

PROBLEMAS CON LOS BASES

5 El puesto de base ha sido el más problemático este año. La lesión de Kartal Ozmizrak durante buena parte de la temporada, que ya ni siquiera pudo debutar con el equipo en el arranque de la competición, y la posterior del capitán Pepe Pozas crearon una gran inestabilidad en un puesto tan importante. La posterior llegada de Albert Oliver, con su veteranía y saber hacer, y la recuperación del turco ya en el tramo final y más decisivo del curso ayudaron a minimizar los problemas que provocaron las ausencias en la dirección de juego del equipo.

BUEN RENDIMIENTO DE LA PLANTILLA

6 También destacaría la temporada de Álex Suárez, un jugador muy sobrio y que ayudó siempre al equipo en muchas facetas. El resto de jugadores, desde Chris Czerapowicz, pasando por Jake Cohen, Laurynas Beliauskas, Álvaro Muñoz, Mike Daum, y terminando por el canterano Rafa Garcia, también han estado a la altura de las circunstancias en la campaña más atípica que se recordará por siempre.

EL TRABAJO Y LA CONTINUIDAD DE MONCHO FERNÁNDEZ

7 Capítulo aparte merece la continuidad de Moncho Fernández y su cuerpo técnico. Es evidente que no tengo la información suficiente para emitir ciertos juicios, pero las últimas declaraciones y puestas en escena hacen prever un desenlace incierto. El presidente Raúl López ya advirtió que se sentarán a hablar esta semana en cuanto haya terminado la competición. Las derivadas económicas de la pandemia van a jugar un papel fundamental en el devenir de los acontecimientos, cuestión de números y de qué presupuesto podrá conseguir el club. El déficit de este año juega en contra de muchas cosas y habrá que ver cuáles son los intereses de cada uno y cuánto se está dispuesto a ceder. Puede que haya llegado la hora de que tanto el cuerpo técnico como el club se tomen un descanso en esta larga y fructífera relación.

DESPEDIDA y DESPEDIDAS

8 Y si llega a producirse la despedida de Moncho Fernández, estoy seguro de que no será un adiós, será un «que te vaya bonito… ojalá nos volvamos a ver». La gente suele dice que «no sabes lo que tienes hasta que lo pierdes», aunque en este caso quizás sí que sabías lo que tenías, pero nunca creíste que pudieses perderlo. Alea jacta est. Forza Obra.