Los usuarios ven la nueva estación de buses más moderna y menos práctica

Margarita Mosteiro Miguel
Marga Mosteiro SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

Creen que está mejor ubicada, pero no les convencen las dársenas al aire libre

18 may 2021 . Actualizado a las 20:32 h.

La estación de autobuses de Santiago se quedará a solo unos meses de poder cumplir 50 años desde que abrió sus puertas en agosto de 1971. El próximo viernes se dirá adiós a las instalaciones de San Caetano y se dará la bienvenida a las de la nueva terminal ubicada en Clara Campoamor. Entre los usuarios que pasan a diario por la vieja estación hay dudas sobre las ventajas de la nueva ubicación y, más aún, sobre su comodidad. En general, reconocen que supondrá una mejora para los viajeros que combinan los viajes en tren y en autobús, y también para los que se desplazan al centro de la ciudad.

Es el caso de María Montes, que trabaja en un supermercado del Ensanche: «Me ahorraré el viaje en el bus urbano, porque podré ir caminando al trabajo». No opina lo mismo, Raquel Vázquez, que ahora baja del bus en San Caetano, cruza Rodríguez de Viguri y casi entra en el portal al que acude todos los días, de lunes a viernes, para cuidar a una persona mayor. «Tengo que mirar los horarios, porque no sé si llegaré bien de hora, y gastaré más, porque tendré que coger el bus urbano», lamenta.

Otra objeción que los usuarios de la vieja terminal ponen a la nueva es que los vehículos ya no accederán a un espacio cubierto, porque pararán al aire libre. «No conozco la estación, pero por lo que se ve desde fuera los autobuses quedan en la calle. Tengo una media hora hasta que sale el bus. Y si llueve, qué hago», dice Carmen sobre la nueva estación, cuya área de viajeros se ubica en la planta superior. Un grupo que espera el bus urbano para bajar al centro coincide en la idea compartida por muchos: «Se mejora en modernidad. Unos nos ahorraremos el bus urbano y otros empezarán a usarlo», comenta.

Usuarios y conductores de buses creen que la vieja estación estuvo muy abandonada, aunque últimamente, valora María Luisa, «estaba mucho mejor. Hasta pusieron un árbol». Algunos usuarios más veteranos sostienen que el aspecto actual de la estación no es real. La falta de peregrinos se deja notar, especialmente, a primera hora, cuando suelen subirse al autobús los que viajan hacia O Cebreiro para empezar el Camino. También echan en falta más estudiantes. «Antes había más chavales, ahora la mayoría tienen coche», dice Marcial.

Los autobuses de los trabajadores de la Xunta pararán en Rodríguez de Viguri

La puesta en marcha de la nueva estación de autobuses genera dudas sobre las paradas del transporte regular fuera de la estación y, en concreto, sobre la salida de los buses de los trabajadores de la Xunta en San Caetano. En este sentido, Gonzalo Muíños apunta que se estudia ubicar una parada en Rodríguez de Viguri para la Xunta. Los conductores del bus a Lugo no saben si saldrán por el periférico, ganando tiempo, o si deberán que cruzar toda la ciudad para parar en San Lázaro.

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«¿Habrá aquí arriba alguna parada?»

Rosario Pérez es usuaria de la estación de autobuses de San Caetano desde hace 8 años. «Durante un tiempo, de lunes a domingo, todos los días. Ahora paso por la estación de lunes a viernes», detalla. La usuaria apunta que «aquí me queda mejor por el trabajo. La nueva está lejos. Si dependo del autobús urbano, no sé si llegaré. Debían hacer una parada por aquí, en el norte», plantea.

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«Aquí el viajero está al abrigo, allí al aire»

Alejandro Neira es conductor de Monbus. Reconoce que «por ahora, sabemos que el día 21 vamos a la nueva estación, pero hay tiempo», comenta. Apunta que «esta estación [por la vieja] es más práctica y cómoda de lo que parece. La gente aquí está al abrigo, pero allí estará al aire libre», explica. En su opinión, «ganamos en modernidad y estética, pero perdemos en lo práctico».

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«Ganaré tiempo en el viaje a Ourense»

José Antonio García es uno de los conductores del autobús de la ruta de Ourense. Para él, la nueva estación supondrá una clara mejoría. «Ganaré tiempo en el viaje, porque saldré para Ourense más directo. No tengo que cruzar toda la ciudad», apunta. José Antonio lleva 13 años visitando casi a diario la estación de Santiago. «Ahora le diré adiós a esta. Antes ya despedí la de Ourense».

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«Hace 30 años que vengo a la estación»

Soledad Romero es una veterana usuaria de la estación de autobuses de San Caetano. «Trabajo en San Pedro, y hace 30 años que vengo a la estación a diario. Me va a dar pena no volver. La nueva será buena para los del tren y los que trabajan en el Ensanche». Soledad vivió los «peores y los mejores años de la terminal. Hace unos años estaba abandonada, pero hicieron algunos arreglos».