Mila Vázquez: «Interesa hacer un acompañamiento a largo plazo a las mujeres sin hogar»

Irene Martín SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

XOAN A. SOLER

Así lo concluye un estudio sobre sinhogarismo femenino que coordina la economista

19 abr 2021 . Actualizado a las 22:56 h.

Nació en Pontevedra en 1965, pero es «de Santiago de toda la vida», pues llegó aquí con siete años. Emilia Vázquez Rozas, profesora titular de Econometría de la USC, ha coordinado un estudio sobre sinhogarismo y violencia de género en Galicia, promovido por la Xunta de Galicia, con resultados reveladores. «Las conclusiones indican la necesidad de mejorar la situación económica de las mujeres, pues se está produciendo una feminización de la pobreza. Además, se observa un aumento del sinhogarismo femenino y la existencia de una relación bidireccional entre este fenómeno y la violencia de género. Se han detectado situaciones indicadoras de riesgo cuando la mujer es obligada por su pareja a dejar su trabajo, cuando solo una persona del hogar aporta ingresos y cuando no existe una organización económica compartida del hogar», explica Vázquez Rozas.

Mayores recursos y servicios orientados a la confluencia de una problemática múltiple y un trabajo en red son algunas de las recomendaciones generales que señala esta investigación. «Hay mujeres sin hogar, o con problemas de vivienda, que sufren violencia machista, pero además hay casos donde también padecen problemas de drogas y/o salud mental. A su vez, estas mujeres se sienten más indefensas y más inseguras, por lo que acaban necesitando mejorar su autoestima. De ahí que interese hacer un acompañamiento a largo plazo, en paralelo con una mayor cooperación entre las Administraciones Públicas. También es cierto que las usuarias tienen buena opinión de los servicios sociales», según advierte la economista. Más plazas asistenciales, una acción «urgente» en vivienda social y una atención «especial» a estas mujeres en riesgo de exclusión, son propuestas de mejora que hace el estudio.

En cuanto a las consecuencias económico-empresariales que dejará la pandemia, la profesora habla del aumento considerable del comercio electrónico, «beneficiando» a las compañías de logística y distribución. «Esta cuestión debe ser tenida en cuenta por las empresas comerciales, que pierden clientes presenciales y deben adaptarse a los nuevos tiempos. Por otra parte, se han cerrado y se cerrarán empresas, aumentando el desempleo, lo cual lleva a la reducción de la actividad económica y, consiguientemente, a menores recursos del Estado. Somos el país de Europa que ha acusado en mayor medida las consecuencias de la pandemia, aumentando el déficit público y la deuda, debido a nuestra dependencia del sector turístico. Así que se deben tomar medidas para fomentar la industria, un sector que tira de los demás», según añade. Por otra parte, se muestra partidaria de favorecer las economías locales: «El incentivo de las entidades de economía social, donde los intereses de las personas están por encima del capital, son importantes para la fijación de la población en zonas rurales y puede ayudar a humanizar la globalización». Agrega que, cuando no es posible promover inversiones propias, es interesante atraer «inversión extranjera directa, siempre que se mantenga a largo plazo».

Mila Vázquez, decana de Económicas en el decenio anterior, demanda una actualización de la plantilla de la USC: «Te pongo un ejemplo, en mi departamento se han jubilado muchos profesores sin que haya habido reposición, y la media de edad está muy por encima de los 50 años. Además, es preciso valorar la docencia en mayor medida. La carrera del profesorado universitario se desarrolla en función de la investigación, y si el Ministerio no lo hace, será la universidad quien deba valorar una buena docencia, pues no olvidemos que estamos formando a los líderes del futuro».