El talud del Pombal, en Santiago, sigue sin solución casi año y medio después del primer derrumbe
SANTIAGO
Raxoi aún no licitó la parte pública y la comisión de Patrimonio Histórico rechazó la solución aportada para una parcela privada
07 abr 2021 . Actualizado a las 13:33 h.A punto de cumplirse año y medio del derrumbe que obligó a cortar el tránsito por la acera derecha (en sentido de subida) del Pombal, el muro de esa calle sigue todavía sin una solución definitiva. Varios apuntalamientos hacia el centro de la rúa llevan desde noviembre del 2019 evidenciando la gravedad de la situación de este céntrico talud. Y el amplio vallado que preserva de un nuevo deslizamiento la confluencia con Travesa do Cruceiro do Gaio recuerda desde mediados de febrero que, lejos de solucionarse, el problema se ha extendido. La solución parece cerca, pero no acaba de concretarse.
Después de esperar un año por un acuerdo (que no llegó) con los propietarios de la parte privada del talud para aportar una solución única, el Concello optó finalmente por requerir a aquellos que actuasen por su cuenta y reclamarles la presentación de sendos proyectos para reparar el desnivel. Raxoi, por su parte, decidía prescindir del proyecto inicial y afrontar la reparación de la parte pública Pero, de momento, ninguna solución ha llegado.
El Concello no ha licitado todavía su intervención y la primera de las propuestas privadas no ha superado el escrutinio de la Comisión Asesora do Patrimonio Histórico, que ayer rechazaba la intervención proyectada para la confluencia del Pombal y Travesa do Cruceiro do Gaio. Y no porque técnicamente no sea correcta, sino por los materiales, que no son adecuados para la zona. Ese ámbito requiere tres actuaciones diferenciadas y solo una podría ejecutarse tal y como se plantea: la de la esquina del Pombal con dicha travesía, donde se propone la reconstrucción del muro empleando materiales como los originales. Pero no es el caso de las actuaciones que dan al Pombal y al Campo de Cruceiro do Gaio.
Para el Pombal se plantea una base de hormigón armado y un cierre de malla metálica, que dicha comisión no considera «coherentes» con la protección patrimonial» del entorno. Y, para Cruceiro do Gaio, donde el muro está catalogado, requiere que se reconstruya con materiales iguales o similares, no con hormigón revestido con cachotería de piedra. El proyecto de la otra parte privada todavía se verá en esta comisión dentro de dos semanas.