Se da una semana para intentar un acuerdo con la oposición
02 mar 2021 . Actualizado a las 05:00 h.La Xunta de Goberno aprobó ayer el proyecto de presupuestos municipales para el 2021, el paso previo a su tramitación ante el pleno. Este es el órgano competente para decidir sobre la cuestión, lo que inicialmente hará el próximo día 12. Esa es la fecha que manejan la edila de Facenda, Marta Abal, y el alcalde, que se ha dado hasta el día 9 (antes de que la propuesta llegue a la comisión informativa de Facenda) para intentar un acuerdo que ahora mismo no tiene asegurado. A los socialistas les valdría con la abstención del PP o de CA para sacarlos adelante y Sánchez Bugallo aspira a que así sea en los contactos que pretende abrir esta semana, tras enviar ayer la propuesta presupuestaria a todos los grupos, que ya tienen el borrador desde hace semanas.
El alcalde augura contactos intensos, que no cierra a ninguna formación, pero advierte que el Concello no se permitirá un ejercicio 2021 sin presupuestos propios. «Son imprescindibles, hai necesidades sociais de que os haxa» y «faremos o que estea ao noso alcance dentro da lei para aprobalos», dijo en alusión a la presentación de una posible cuestión de confianza si el pleno no les da el visto bueno. Su discurso de los últimos días, e incluso el de ayer, con ese órdago velado, anuncian un escenario negociador difícil ante una oposición que, en buena medida, al menos por el ala izquierda, reclama un presupuesto más expansivo, aunque el gobierno defiende que este ya lo es, con un aumento de un 7 %, hasta sobrepasar los 125 millones.
Bugallo anuncia un presupuesto donde el gasto social crece más de 1,7 millones, pero también suben los gastos derivados de la pandemia y los costes a mayores que supondrán los grandes contratos de servicios pendientes de licitación (transporte, limpieza, zonas verdes...), lo que limita el margen de maniobra, defiende el socialista frente a algunas de las demandas opositoras.
Y el Concello, expuso, tiene que asegurar capacidad para hacer frente a las necesidades también del 2022 sin hipotecar maniobrabilidad futura, porque si bien los requerimientos de la pandemia obligan a «aprazar» ahora la atención a algunas necesidades, «non podemos adoptar acordos que tamén nos obriguen a aprazalos no futuro», dijo tras presentar un presupuesto «equilibrado que responde á realidade desta crise pandémica». «Todos chegamos cunhas ideas, pero atopámonos cun escenario completamente diferente e todos temos que asumir que nos temos que adaptar a el», añadió en defensa de un presupuesto que, salvo pequeños matices, responde en su totalidad al borrador presentado en enero, aunque en esta ocasión el gobierno entró en mayor detalles con las inversiones, que suben hasta los casi 18,5 millones.
Las inversiones reservan casi medio millón para la depuradora
Las inversiones municipales crecerán casi un 20 %, financiadas en buena medida con un préstamo bancario (10 millones, de casi 18,5). El sellado del vertedero de Aríns se llevará un buen pico (un millón), tanto como el proyecto de la depuradora (453.750 euros) y la estabilización de los muros de Fontiñas y el talud de Bidueiro (620.545) juntos. La mejora de viales urbanos se atenderá hasta donde lleguen sus 1,5 millones, mientras que el aparcamiento de Triacastela y la obra de Concheiros consumirán 788.000 euros, algo más de lo destinado (casi 600.000) a reparaciones pendientes en equipamientos municipales (centros sociales, guarderías, pabellones deportivos). La digitalización de las Administración exigirá una inversión de 545.000 euros, incluidos dentro del programa Edusi, que dispondrá otros 1,3 millones para la restauración del Sarela (435.665), la Casa das Máquinas (145.459), el centro integral para la inclusión social (580.887) y mejoras en el campus, a las que apenas se dedican 157.500 euros. El rural dispondrá de 2,4 millones para intervenciones viarias y en equipamientos.