Música de casa con raíces dispersas

M. O. SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

Paco Rodríguez

Antía Muíños, Lou Reyes y Broken Peach repartieron la atención ayer del Apóstolo

20 jul 2020 . Actualizado a las 04:50 h.

Producción propia y profusión de estilos. Las Festas do Apóstolo han abierto sus puertas a la creación artística con sello compostelano y gallego, una línea en la que muchos santiagueses podrán identificarse con las fiestas, frustradas este año, de la Ascensión. Las limitaciones de movilidad del covid y la afectación que ha tenido en el sector de la cultura le han dado la alternativa en las fiestas grandes para acercarse al público con el que los creadores locales pueden cruzarse en cualquier momento. Y al público, la ocasión para descubrir, en muchos casos, el talento que crece a su lado, como el de Antía Muíño, de O Milladoiro, que ayer abría el programa musical de la jornada desde Bonaval dando cuenta de algunos de los estilos en los que se mueve.

Pese a su juventud, Antía bebió en su adolescencia del folk y la música gallega, para alternar posteriormente con el jazz y la bossa nova al tiempo que se formaba en la clásica. Con acento de casa sonó también el recorrido por el rockabilly, entre otros toques, que hizo el compostelano Lou Reyes en Galeras, en su caso con más de 30 años de tablas. Lo acompañaron The Rockin Corsarios. Difícil en su caso mantenerse asido a los asientos sobre los que hay que seguir los conciertos de esta edición. Difícil también en A Quintana, donde la banda viguesa de rock y soul Broken Peach animó la noche con su peculiar estilo de fusión de música y espectáculo.