Javier Blanco: «As obras dos 20 artistas responden ao momento emocional do confinamento»

Montse García Iglesias
Montse García SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

Sandra Alonso

El 20 % de las ventas de «Confinados» se destinará a una organización benéfica

12 jun 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Una mascarilla de papel recortado elaborada por Nacho Zubelzu es la carta de presentación de Confinados, la exposición con la que ha reabierto sus puertas la compostelana galería Metro. «A mostra nace no confinamento. Estabamos confinados, pero non parados. Os artistas seguían facendo cousas na casa na medida en que as circunstancias llo posibilitaban, con pequenos materiais, fóra do estudio porque algúns creadores téñeno fóra do seu domicilio e durante algunhas semanas non puideron ir... A min pareceume interesante facer unha mostra de todo ese material», asegura el director de la galería, Javier Blanco. Y, ahora, el resultado de ese trabajo en el estado de alarma de una veintena de artistas puede verse hasta el 5 de septiembre.

«Todo este material dos vinte artistas, dalgún xeito, responde a un estado emocional dun momento moi concreto e, quizais, nunca antes vivido por eles. Aínda que non todas as obras teñen que ver con aspectos obvios do confinamento, si que foron creadas nunhas circunstancias nas que todos, ao principio, quedamos medio en shock. Iso creounos a todos un estado emocional moi singular e estas obras nacen de aí», explica Javier Blanco. Aunque en estos primeros días hay una veintena de artistas relacionados con la galería, hasta el cierre en septiembre, la nómina puede irse incrementando. Además, algunos de los trabajos aún están pendientes de llegar. Este es el caso de las obras de Ana Pérez Ventura, que reside en París, que las envió el 13 de mayo «e perdéronse no correo francés». Por su parte, Marc Quintana no pudo hacerlo todavía hacerlo ya que estaba inmerso en una muestra en el Museo de Arte Moderno de Tarragona.

Los artistas participantes en esta singular exposición colectiva son en su mayoría gallegos, pero también los hay de otros lugares como Sevilla, Málaga, Asturias o París, entre otros. Se trata de Ana Pérez Ventura, Sebas Anxo, Santi Jiménez, Lúa Gándara, Xavier Cuíñas, Xaquín Chaves, Lito Portela, Nacho Zubalzu, Haya Blanco, Marc Quintana, Olmo Blanco, Paula Vicenti, David Catá, Alina Granados, Emilio Mariño, Ana Gil Rodríguez, Guillermo Simón, Federico Granell, Little y Sheila Pazos. Algunos de estos creadores, explica Blanco, debido a las limitaciones del confinamiento, variaron su trabajo habitual, pasando de creaciones manuales a propuestas digitales. Otro ejemplo es el de la fotógrafa Ana Gil, que trabajó para la ocasión con una casa de muñecas en la que confinó cuatro obras. En la galería se exhiben dos piezas enmarcadas de cada uno de los creadores, a lo que hay que sumar otras que forman parte de un expositor y que durante las próximas semanas pueden ir rotando. «Unha vez que entras no espazo da galería sínteste identificado con ese momento do confinamento», afirma el galerista.

Por otra parte, estos trabajos también tienen un carácter benéfico. Así, un 20 % de las ventas tendrán como destino una entidad social. «Pensamos no Banco de Alimentos de Santiago, pero aínda está sen decidir. Irá seguro a axudar a paliar a situación que xerou o coronavirus», afirmó el galerista, quien también recordó que los precios de estas obras son un 30 % menores al habitual en estos artistas.

Desde la galería Metro consideraron que esta exposición con obras realizadas durante el confinamiento era la mejor forma de iniciar la desescalada «para darlle visibilidade aos artistas e para ver nós como se vai desenvolvendo todo». De esta forma, variaron las exposiciones inicialmente previstas y será después del verano cuando retomen la programación más regular.